En el argot de las subastas ninguna cantidad es demasiado alta, y más cuando se trata de joyería. Pero este diamante rosa ha batido récord como el diamante más caro que se haya vendido –por teléfono- dentro de una subasta con 71.2 millones de dólares.
Ginebra es el país que ha destacado como el corazón de las subastas de diamantes, en donde muchos darían lo que fuera por adquirir una de las piedras preciosas que se exhiben y se subastan alrededor del mundo. Pero en esta ocasión esta ciudad suiza perdió el record de costosas joyas.
La ganadora de esta hazaña se trata de la casa Sotheby’s en Honk Kong, que por segunda vez tenía como propiedad al diamante rosa llamado “Pink Star”. Y nos referimos a segunda vez porque anteriormente éste mismo fue subastado por 83 millones de dólares, pero el postor (en conjunto con sus socios) no hizo frente a su deuda. Lo que no se sabe es si no pudieron pagarlo o simplemente no quisieron, por lo que tuvo que ser devuelto.
Casi 4 años más tarde, vuelve a exponerse ante los reflectores de las subastas y tuvo únicamente cinco minutos de fama cuando alguien por teléfono marcó para ofrecer la “módica” cantidad de 71.2 millones como oferta final, cosa que abrumó a todos y se cerró como la última y mejor apuesta.
Y es que cada centímetro de este hermoso diamante lo vale, ya que es de 59.60 quilates y se tardaron aproximadamente 2 años en cortarlo para que tomara forma de óvalo con un rosa casi transparente, lo que lo vuelve único.
De hecho, en la GIA Colored Diamond Report fue catalogado como el diamante más largo y perfecto con un color rosa fantasía. Estuvo exhibido desde el 2003 en el Museo Nacional Smithsonian y posteriormente fue seleccionado para subastarse, hasta que en 2012 por un momento se había considerado vendido… pero no por mucho tiempo.
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