Recomendaciones napolitanas para elegir el mejor saco

“Nápoles es la ciudad de la sastrería. Italia es un país pequeño, pero cuenta con diferentes regiones y Nápoles siempre se ha distinguido por ser una donde se producen piezas hechas a mano, apunta para Forbes Life Enrico Libani, CEO de Cesare Attolini para América, quien a través de la boutique Silver Deer se encuentra marcando presencia con sus piezas en territorio mexicano.

Inspiraciones napolitanas

Para comprender un poco más acerca del legado de esta firma de origen italiano, es preciso apuntar que la familia Attolini es considerada pionera en el mundo de la sastrería, comenzando con Vincenzo Attolini en la década de 1930.

Libani, apunta que Vincenzo es considerado el arquitecto de la sastrería napolitana y fue quien se centró en retomar la tradición del estilo inglés, pero adaptándolo a un clima más cálido como el de Nápoles. La intervención consistió en crear un saco mucho más ligero, ya que el saco inglés era muy estructurado y pesado. Finalmente, el concepto consistió en suavizar la caída del hombro, dándole la misma estructura, pero con mayor movilidad y frescura para obtener algo que fuera más ligero.

Así es como esta primera intervención de confección y diseño marcaría el futuro de una marca que tiene como encomienda presentar cortes y diseños napolitanos.

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Recomendaciones de experto

Libani comparte que al momento de elegir un buen saco es importante prestar atención a la hechura del hombro y del cuello. “Estos son aspectos muy críticos porque no son costuras lineales, son circulares”.

Es importante siempre tomar en cuenta la sensibilidad del sastre y su mano, ya que “en una costura lineal, una máquina lo puede realizar perfectamente bien, pero en una costura circular como las mangas, los hombros y el cuello, interviene en gran medida la mano de sastre, y eso es lo más deseable en una prenda hecha a mano porque esto se traduce en una mayor comodidad y una sensación más lujosa”.

Libani indica que es importante valorar las piezas desarrolladas por maestros sastres, ya que son piezas artesanales que brillan en estética. Al final de una buena misión de sastrería, que puede tomar hasta 50 horas en un saco, se puede hablar de una máxima calidad en diseño y confección. “Si al final el cliente cuando se pone su saco no le gusta lo que ve en el espejo, hemos fallado en nuestra misión”, finaliza Libani.

“La ropa italiana es la más importante en el mundo, marca las tendencias de moda”
Enrico Libani, CEO de Cesare Attolini para América

México y el uso de piezas italianas

“Los italianos tienen pasión, y los mexicanos también”, expresa Libani, mientras agrega que en México ve un gran potencial para el estilo napolitano, y es que existe un nivel de sensibilidad importante ante el uso de sacos bien confeccionados. Además, comparte desearía existiera mayor presencia en México de productos artesanales, de piezas hechas en Italia. “Creo que hay una oportunidad en México para que estas marcas tengan mucho éxito”.