Reuters.- Los rescatistas buscaban sobrevivientes el jueves entre los escombros de un teatro en la asediada ciudad de Mariúpol, que Ucrania dijo fue atacado en una ofensiva aérea rusa mientras había gente refugiada allí por los bombardeos.
Rusia negó haber atacado el teatro, pero sus fuerzas han destruido ciudades y matado a muchos civiles durante su asalto sobre Ucrania, que entró ahora en su cuarta semana.
Mariúpol ha sufrido la peor catástrofe humanitaria de la guerra, con cientos de miles de civiles atrapados en sótanos sin comida, agua o electricidad mientras las fuerzas rusas la bombardean con fuego de artillería y ataques aéreos.
Un asesor municipal, Petro Andrushchenko, afirmó que el número de víctimas del presunto ataque sobre el teatro del miércoles no era conocido, pero el refugio había aguantado.
“Ahora se están retirando los escombros. Hay supervivientes”, dijo a Reuters por teléfono.
Imágenes de satélites comerciales mostraron que la palabra “niños” había sido escrita en el suelo en un terreno frente al edificio antes de ser atacado.
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso, Maria Zakharova, dijo que la acusación de que Rusia bombardeó el teatro es una “mentira” y reiteró las negativas del Kremlin sobre ataques de sus fuerzas contra objetivos civiles.
“Las fuerzas armadas rusas no bombardean pueblos y ciudades”, dijo en una comparecencia.
El consejo municipal de Mariúpol afirmó más tarde que más de 350,000 personas seguían refugiadas en la ciudad y que 30,000 habían logrado escapar ya.
El asalto sobre Ucrania comenzó cuando las tropas cruzaron la frontera o llegaron por mar y aire el 24 de febrero. No obstante, los países occidentales aseguran que sus expectativas de una rápida victoria y la caída del gobierno del presidente Volodímir Zelenski se han disipado y su fuerza de invasión se ha empantanado.
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Partes muy separadas
La guerra se ha asentado en un patrón de asedios destructores de ciudades. Naciones Unidas dijo que 3.2 millones de civiles, en su mayoría mujeres y niños, han huido de Ucrania a países vecinos. Sin embargo, los rusos no han logrado capturar una ciudad importante frente a la enérgica resistencia de las fuerzas ucranianas.
La inteligencia militar británica dijo en una actualización el jueves que la invasión se había “estancado en gran medida en todos los frentes” y que las fuerzas rusas estaban sufriendo grandes pérdidas.
Se llevó a cabo un cuarto día consecutivo de conversaciones entre los negociadores rusos y ucranianos por enlace de video, pero los funcionarios occidentales indicaron que las dos partes se mantenían alejadas.
“Ambas partes se lo están tomando en serio, pero hay una brecha muy, muy grande entre las posiciones en cuestión”, dijo un funcionario.
Un asesor de Zelenski dijo que Ucrania se está apegando a su postura central de retener la soberanía sobre las áreas ocupadas desde 2014 por las fuerzas rusas y prorrusas.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha mostrado pocas señales de ceder, a pesar de que las sanciones punitivas occidentales están dañando la economía de su país.
En un discurso televisado, arremetió contra los “traidores y la escoria” de su país que ayudan a Occidente, y dijo que el pueblo ruso los escupirá como mosquitos.
Kiev y sus aliados occidentales creen que Rusia lanzó la guerra para subyugar a un vecino al que Putin califica de estado artificial. Moscú dice que está llevando a cabo una “operación especial” para desarmarlo y “desnazificarlo”.
En el frente diplomático, la Casa Blanca dijo que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hablará el viernes con el líder chino, Xi Jinping, mientras Washington intenta persuadir a Pekín de que no brinde apoyo a Rusia.
Zelenski ofreció un discurso por videoconferencia ante el Bundestag alemán, en el que invocó el Holocausto y el Muro de Berlín, en un aparente intento por avergonzar a los políticos prorrusos en Alemania, el mayor comprador de energía de Moscú.
Sábana ensangrentada
Los suburbios del noreste y noroeste de Kiev han sufrido fuertes daños, pero la capital se mantiene firme, bajo toque de queda y sometida a mortales ataques nocturnos con cohetes.
Un edificio del distrito capitalino de Darnytsky resultó muy dañado por lo que las autoridades calificaron como restos de un misil derribado temprano en la mañana.
Mientras los residentes limpiaban los cristales y se llevaban las bolsas con sus pertenencias, un hombre se arrodillaba llorando junto al cuerpo de una mujer que yacía cerca de una puerta, cubierto con una sábana ensangrentada.
Viacheslav Chaus, gobernador de Chernihiv, una ciudad en la línea de frente del norte, dijo que 53 civiles murieron allí en las últimas 24 horas. La cifra no pudo ser verificada de forma independiente.
Rusia ha asaltado Ucrania desde cuatro direcciones, enviando dos enormes columnas hacia Kiev desde el noroeste y el noreste, empujando desde el este cerca de la segunda ciudad más grande, Járkov, y extendiéndose en el sur desde Crimea.
Funcionarios ucranianos dijeron creer que Rusia se está quedando sin tropas para seguir luchando y podría acabar reconociendo pronto su fracaso en su intento de derrocar al gobierno ucraniano.
Moscú asegura que está cerca de acordar una fórmula que mantenga la neutralidad de Ucrania, una de sus exigencias desde hace tiempo.
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