Reuters.- El gasto de los consumidores estadounidenses aumentó más de lo previsto en abril, impulsando las perspectivas de crecimiento de la economía para el segundo trimestre, y la inflación repuntó, lo que podría hacer que la Reserva Federal mantuviera las tasas de interés más altas durante algún tiempo.

El índice de precios de los gastos de consumo personal (PCE) aumentó un 0.4% en abril, tras subir un 0.1% en marzo. En los 12 meses hasta abril, el índice de precios PCE creció un 4.4% tras avanzar un 4.2% en marzo.

Si se excluyen los volátiles componentes alimentario y energético, el índice de precios PCE subió un 0.4% tras avanzar un 0.3% en marzo. El llamado índice de precios PCE subyacente aumentó un 4.7% interanual en abril, tras el 4.6% en marzo. La Reserva Federal sigue los índices de precios PCE para alcanzar su objetivo de inflación del 2%.

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El gasto de los consumidores aumentó un 0.8% el mes pasado, informó el viernes el Departamento de Comercio. Los datos de marzo se revisaron al alza para mostrar un avance del 0.1%, en vez de mantenerse sin cambios como se había informado previamente. Economistas consultados por Reuters esperaban que el gasto de los consumidores, que representa más de dos tercios de la actividad económica estadounidense, aumentara un 0.4%.

El incremento del gasto de los consumidores el mes pasado atenuó las expectativas de los economistas de una fuerte desaceleración este trimestre. Aunque en el primer trimestre el gasto se aceleró a su ritmo más rápido en casi dos años, gran parte del crecimiento se concentró en enero. La debilidad de febrero y marzo situó el gasto de los consumidores en una trayectoria de menor crecimiento de cara al segundo trimestre.

El gasto de los consumidores se está viendo respaldado por los fuertes aumentos salariales en un mercado laboral tenso. La recuperación del mercado laboral, el repunte de la producción industrial y la reactivación de la actividad empresarial sugieren que la economía está recuperando velocidad tras crecer a una tasa anualizada del 1.3% en el primer trimestre.

Aun así, el gasto de los consumidores se ha ralentizado desde el repunte de enero, ya que los estadounidenses son cada vez más sensibles a los precios.

Las prestaciones sociales del gobierno también están disminuyendo y se cree que la mayoría de los hogares con rentas más bajas han agotado los ahorros acumulados durante la pandemia por Covid-19.

El crédito también se ha encarecido mucho tras las alzas de las tasas de interés de la Reserva Federal en un total de 500 puntos básicos desde marzo de 2022, cuando el banco central emprendió su campaña de endurecimiento de la política monetaria más rápida desde la década de 1980 para contener la inflación.

Los bancos también están endureciendo el crédito tras las recientes turbulencias de los mercados financieros.

Las minutas de la reunión de política monetaria de la Fed del 2 y 3 de mayo, publicadas el miércoles, mostraron que las autoridades del banco central “coincidían en general” en que la necesidad de nuevas subidas de tasas “era cada vez menos cierta”.

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