Un sondeo de la empresa CID-Gallup, publicada por El Nuevo Diario de Nicaragua, indicó que la mayoría de los nicaragüenses apoyan un adelanto de las elecciones presidenciales y una renuncia del presidente Daniel Ortega para que el país recupere la normalidad tras la crisis generada por las protestas del año pasado. De acuerdo al sondeo un 54% se pronunció a favor de adelantar los comicios mientras 36% prefiere que se mantenga la fecha de 2021. En tanto que un 49% consideró que para que el país recupere la normalidad lo mejor es adelantar los comicios, mientras que 35% dijo que la normalidad se podría alcanzar con la reanudación del diálogo entre el gobierno y la oposición, estancada desde junio. Asimismo, un 49% se declaró a favor de la renuncia de Ortega y de su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, contra un 39% que apoya su permanencia en el poder. No obstante, la encuesta mostró una leve mejora en el porcentaje de las personas que desconfían del gobierno de Ortega que se colocó en un 66%, en comparación con el 74% que expresó desconfianza en su administración en septiembre del año pasado. Respecto a esta mejora, Carlos Denton, presidente de CID-Gallup, explicó que “la gente se está acostumbrando a los disturbios actuales y menciona que ya son parte del vivir de Nicaragua”. Puedes leer: Turismo en Nicaragua pierde 232 mdd por crisis La consulta realizada del 4 al 10 de enero, efectuada a aproximadamente 1,189 personas, con un margen de error de 2.8%, también reveló que en un posible escenario electoral, un 54% dijo que no tiene un candidato favorito, 14% que no sabe y 12% mencionó al reconocido periodista, Carlos Fernando Chamorro. Sin embargo, pese a la crisis Ortega, un exguerrillero de 73 años que gobernó durante la revolución en los años 80 y retorno al poder en 2007, mantiene una base de apoyo superior a los otros partidos. Mientras que un 68% no se inclina por ningún partido político, un 25% prefiere la permanencia de su partido, el  Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). La crisis en Nicaragua estalló el 18 de abril cuando una fallida reforma del seguro social desató inesperadas protestas, que luego se transformaron en una demanda para la salida de Ortega. Según grupos humanitarios, al menos 325 nicaragüenses murieron durante las protestas por el “uso excesivo de la fuerza” por parte del gobierno, y más de 600 están presos por participar en las manifestaciones.

 

Siguientes artículos

El Salvador desmiente rumores sobre cancelación del TLC
Por

La ministra de economía indicó que no existe información, discusión o estudio alguno sobre la cancelación del TLC por pa...