Existe un debate sobre si la totalidad de los delitos graves los delincuentes utilizan o no el sistema financiero para realizar operaciones con recursos de procedencia ilícita. Durante la semana pasada tuve la oportunidad de leer con mucho agrado el interesante libro publicado por mi buen amigo José Fernández de Cevallos y Torres titulado “Blanqueo de Capitales y Principio de Lesividad” mismo que contribuye en mucho a enriquecer la literatura que sobre este tema tan importante para la sociedad y autoridades por desgracia es escasa sobre todo en nuestros países donde el español o castellano es la lengua oficial. Entre muchos de los conceptos desarrollados en la obra de Fernández de Cevallos y Torres quisiera compartir con ustedes estimados lectores uno que me llama mucho la atención y considero debe ser prioritario en las estrategias de combate a la delincuencia organizada por parte de las autoridades correspondientes. Dicho tema es el relativo a las operaciones fuera del sistema financiero. En la actualidad existe debate en la doctrina sobre el tema de si en la totalidad de los delitos considerados como graves cometidos por miembros de la delincuencia organizada los delincuentes utilizan o no el sistema financiero para realizar operaciones con recursos de procedencia ilícita. Desde mi punto de vista lo continúan utilizando en diferentes escalas aunque también sin duda existe un alto volumen de recursos que circulan fuera del mismo. En su obra Fernández de Cevallos y Torres menciona que: “Por lo que respecta a las operaciones comúnmente realizadas, hacia el interior de los países, sin utilizar el sistema financiero, y que tienen como trasfondo el lavado de activos, la doctrina ha señalado como de común realización las siguientes: La formación de empresas ficticias, es un recurso ampliamente usado por los que se dedican a esta actividad criminal, con todas las ramificaciones-desde luego ilícitas-, que puede alcanzar la actividad empresarial, como el uso de trabajadores clandestinos o inmigrantes que hacen remesas en efectivo a sus países utilizando sus cuentas bancarias. Contratos ficticios que impliquen la translación de algún derecho, usualmente contratos de compraventa o alquiler. Existe la tendencia en las legislaciones de imponer un límite a los montos en efectivo que pueden ser manejados en la compraventa de inmuebles, sin embargo, para saltarse el impedimento legal, los blanqueadores han empleado contratos con reserva de dominio, donde la obligación de pago se difiera en el tiempo y siempre por montos inferiores a los que impone la ley, con lo cual evitarán levantar sospechas por parte de las autoridades. Uso de establecimientos que prestan servicios al público y que  precisamente por su giro es muy fácil alterar los datos que registran el flujo de capital que reciben, tal es el caso de hoteles, casinos, restaurantes, etc., dice Blanco Cordero, que estos negocios que generan una gran cantidad de dinero en metálico, y que ofrecen sus servicios a una masa anónima e indeterminada de consumidores, ofrecen también muchas ventajas a quienes pretenden blanquear capitales, ya que normalmente los clientes pagan con dinero en metálico con lo que resulta muy sencillo inflar los ingresos de forma artificial, mezclándolos con los ingresos ilícitos. Así concluye que cualquier negocio que genere ingresos en efectivo, y que en lugar de facturas emita notas de consumo o tickets, será una buena herramienta para reciclar. Puedo concluir sobre lo aquí comentado que uno de los fines principales que persigue la delincuencia organizada es la ganancia ilícita proveniente de dicha actividad, la cual es utilizada por el delincuente para financiar más delitos así como para invertir dichas ganancias en diversos bienes de consumo o de inversión. Es prioritario que existan las técnicas adecuadas que permitan conocer inmediatamente a las autoridades el circuito del dinero obtenido por los delincuentes, impidiéndoles la ampliación de su proyecto delictivo a escala simple o ampliada, así como el disfrute de la ganancia delictiva mediante proyectos de inversión o adquisición de bienes por parte de ellos o de interpósitas personas. Sir Francis Bacon, filósofo y estadista británico dijo: “La lectura hace el hombre completo; la conversación, ágil, y el escribir, preciso”. Felicidades a José Fernández de Cevallos y Torres por su libro. ¿Usted qué opina, estimado lector?   Contacto: www.garciagibson-consultores.com [email protected] @garciagibson   *Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

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