Reuters.- Por undécimo mes consecutivo, el índice mundial de precios de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) cayó en febrero un 19%, desde el máximo histórico alcanzado en marzo tras la invasión rusa de Ucrania.
El índice de precios de la FAO, que hace un seguimiento de los productos alimentarios más comercializados a nivel mundial, registró una media de 129.8 puntos el mes pasado, frente a los 130.6 de enero, según informó la agencia el viernes. Se trata de la lectura más baja desde septiembre de 2021.
Según la actualización mensual, el descenso del índice puso de manifiesto la bajada de los precios de los aceites vegetales y los productos lácteos, que compensaron con creces la fuerte subida de los precios del azúcar.
El índice de precios de los cereales de la FAO cayó un 0.1% intermensual en febrero, y una subida marginal de los precios del trigo quedó más que compensada por la bajada de los precios del arroz.
Los aceites vegetales cayeron un 3.2% y los productos lácteos bajaron un 2.7%, mientras que el azúcar subió un 6.9%, a su nivel más alto en seis años, debido en gran parte a una revisión a la baja de la producción en la India.
MENOR PRODUCCIÓN DE TRIGO, ESTIMA LA FAO
En un informe separado sobre la oferta y la demanda de cereales, la FAO publicó una primera previsión preliminar para la producción mundial de trigo en 2023, que apunta a un descenso interanual a los 784 millones de toneladas, aunque la cosecha seguiría siendo la segunda más alta de la historia.
“En Ucrania, las graves limitaciones financieras, los daños a las infraestructuras y la obstrucción del acceso a los campos en algunas partes del país han provocado una reducción interanual estimada del 40% en la superficie de trigo de invierno para 2023, y se prevé una producción de trigo muy por debajo de la media en 2023”, señaló la FAO.
Ese descenso se ve parcialmente compensado por un aumento previsto en la producción de EU a los 51 millones de toneladas, y los altos precios podrían llevar a un incremento en las siembras de trigo al nivel más alto desde 2015.
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La FAO elevó su previsión para la producción mundial de cereales en 2022 en 9 millones de toneladas, a los 2,770 millones de toneladas, aunque esta cifra seguiría siendo un 1.3% inferior en términos interanuales.
El informe señala que la mayor parte de la revisión al alza se refiere al arroz, con una mejora de las perspectivas de producción en India.
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