¿Qué implica que la solicitud de salida a la bolsa hecha por Twitter sea privada? ¿Qué se espera de la oferta? ¿Qué otros casos similares hay? Aquí te lo explicamos.   Por Steve Schaefer   Para las empresas de cierto tamaño, con ingresos anuales de menos de 1,000 millones de dólares (mdd), la JOBS Act —la legislación vigente en Estados Unidos en la materia— permite realizar solicitudes confidenciales de Oferta Pública Inicial. Una serie de empresas han utilizado esta vía para salir a bolsa en 2013, Twitter es la más reciente. Revelando sus intenciones en un tweet —hasta ahí, ninguna sorpresa— Twitter anunció al mundo que ha presentado confidencialmente una solicitud a la SEC, lo que significa que se puede entablar un diálogo con los reguladores sobre sus documentos de registro fuera de la vista pública. Si bien el hecho de que la presentación confidencial sin duda permite a Twitter evitar que alguien vea sus cartas —la empresa no está obligada a revelar los detalles financieros hasta 21 días antes de su gira—, lo cual revela que en efecto ha hecho la solicitud, ello también erosiona algunos de los beneficios. Después de todo, parte de la razón por la cual muchas empresas hacen una presentación privadas es para probar las aguas y determinar si el momento es adecuado de hacerse públicas. Ése fue el caso de ConnectOne Bank, un banco comunitario de Nueva Jersey que comenzó a cotizar en el Nasdaq a principios de este año. Su CEO, Frank Sorrentino, dice que la mayor ventaja de presentar de forma confidencial conforme a la JOBS Act fue la capacidad de evaluar si existía interés y tener un diálogo con los reguladores antes de revelar públicamente las intenciones del banco. Cuando ConnectOne comenzó su proceso de salida a bolsa hace un año, ciertamente enfrentó un  poco de incertidumbre. El país estaba enfocado en una polémica elección presidencial, el precipicio fiscal se avecinaba y la valuación de acciones bancarias estaba lejos de ser algo emocionante. “Si hubiera surgido algún peligro inminente durante el proceso, podríamos haber retirado nuestra aplicación y nadie, fuera de nuestra alta dirección, hubiera sabido”, dijo Sorrentino. En el caso de Twitter esa posibilidad se ha ido, y la decisión de presentar de forma confidencial sin duda plantea interrogantes acerca de lo que incluirá su presentación cuando se haga pública. Para Sorrentino eso es un poco confuso, y seguramente plantear preguntas acerca de lo que la compañía podría estar tratando de mantener en secreto por el mayor tiempo posible. La JOBS Act permite revelaciones iniciales más claras alrededor de temas como la remuneración a ejecutivos, por ejemplo. Y, a diferencia de ConnectOne y otros contribuyentes confidenciales que mantienen sus intenciones en secreto hasta que salen al público, todo el mundo se va a enterar si Twitter desecha su oferta, por improbable que eso sea. En su columna en DealBook, Steven Davidoff sugiere que la presentación estará “llena de sorpresas”, que pueden incluir disposiciones para asegurar el control de la compañía a sus fundadores y altos directivos, una estructura similar a la de otras firmas tecnológicas como Facebook y Google. Mientras que Twitter mantendrá un férreo control sobre su información financiera con la presentación confidencial, también tiene la ventaja de aprender de otras ofertas de empresas tecnológicas de alto nivel que han tenido diversos grados de éxito. Facebook era, por supuesto, la de más alto nivel entre esas ofertas, con una oferta pública inicial que se desplomó en su debut en medio de críticas sobre los precios, liderados por el colocador Morgan Stanley y un problema técnico en el Nasdaq que congeló sus operaciones durante el primer día. LinkedIn ha tenido la colocación más exitosa, saliendo al mercado público un año antes que Facebook. Su segunda oferta, hecha recientemente, se vendió en más de cinco veces su precio de salida a bolsa. Luego están los gemelos tóxicos: Groupon y Zynga, que salieron a la bolsa con unas pocas semanas de diferencia en 2011 y enfrentaron un intenso escrutinio desde el principio. Groupon recibió presión de los reguladores debido a un dato contable inventado, mientras que la dependencia de Zynga de  Facebook fue un punto clave de discusión antes de su debut. Aparte del aprendizaje de la experiencia de sus pares, la presentación confidencial de Twitter también permitirá que, en teoría, presente una primera aproximación más limpia de sus estados financieros y sus perspectivas de crecimiento, que en definitiva son lo que los inversores querrán juzgar. Se ha dicho que Twitter ha contratado a Goldman Sachs Group como el principal colocador de su salida a bolsa. Queda por ver si optará por el NYSE o el Nasdaq, y qué símbolo elegirá para el ticker.

 

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