Ventas minoristas y precios al productor en EU bajan en febrero
El Departamento de Comercio dijo el martes que las ventas minoristas cayeron un 0.1% el mes pasado al disminuir las ventas de automóviles, al tiempo que la gasolina más barata recortó los ingresos en las estaciones de servicio.
Reuters
Las ventas minoristas de Estados Unidos cayeron menos de lo esperado en febrero, pero una fuerte revisión a la baja en el dato minorista de enero podría renovar las preocupaciones en torno a las perspectivas para el crecimiento económico del país.
El Departamento de Comercio dijo el martes que las ventas minoristas cayeron un 0.1% el mes pasado al disminuir las ventas de automóviles, al tiempo que la gasolina más barata recortó los ingresos en las estaciones de servicio.
Las ventas de enero fueron revisadas para mostrar un declive de 0.4% en lugar del aumento reportado preliminarmente de 0.2%.
Economistas consultados por Reuters esperaban que las ventas minoristas cayeran un 0.2% en febrero.
Por otra parte los precios al productor de Estados Unidos bajaron en febrero por una caída de los costos de la energía y los alimentos, pero no mostraron cambios respecto del mismo mes del 2015, sugiriendo que la tendencia al descenso se acerca a su final.
El Departamento de Trabajo dijo el martes que su índice de precios al productor (IPP) se redujo 0.2% el mes pasado tras crecer 0.1% en enero.
En los 12 meses a febrero, el IPP se mantuvo sin cambios luego de caer 0.2% en enero.
Los economistas encuestados por Reuters esperaban un retroceso de 0.2% en el IPP del mes pasado, con un aumento anual de 0.1%.
Estas bajas en ventas podrían reavivar las preocupaciones en torno al crecimiento económico de Estados Unidos, aunque los miembros de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos ponen especial énfasis en la inflación y recuperación de empleos.
La Fed no elevará las tasas de interés esta semana, pero probablemente dejará en claro que mientras la inflación y los empleos continúen mejorando, la debilidad económica internacional no impedirá que las tasas suban pronto.
Eso sería un cambio importante desde la última vez que se reunió la Fed, cuando la incertidumbre sobre el impacto de un menor crecimiento en China y Europa llevó a los funcionarios a indicar que no harían modificaciones hasta poder determinar de manera más precisa el panorama.
