Francia multará a empresas que no eliminen la brecha salarial de género
Las empresas francesas tendrán tres años para borrar sus diferencias salariales de género o enfrentar posibles multas en virtud de los planes presentados por el primer ministro.
Las empresas francesas tendrán tres años para borrar sus diferencias salariales de género o enfrentar posibles multas en virtud de los planes presentados por el primer ministro Edouard Philippe a los sindicatos y los empleadores.
Los hombres ganan en promedio 9% más que las mujeres en Francia, a pesar de que la ley ha exigido el mismo salario por el mismo trabajo en los últimos 45 años, dijo el gobierno.
Según los planes, las empresas con más de 50 empleados deberán instalar un software especial conectado directamente a sus sistemas de nómina para monitorear las brechas salariales injustificadas.
El objetivo era implementar el software en las empresas con más de 250 empleados el próximo año y en 2020 para las empresas con 50 a 249 trabajadores.
Si una empresa no logra eliminar una brecha salarial detectada por el software durante tres años, los inspectores del trabajo podrían imponer una multa de hasta el 1% de la factura salarial de la empresa.
“El software no es una varita mágica, pero revelará ciertas diferencias en la paga entre hombres y mujeres”, dijo Philippe a periodistas luego de reunirse con sindicatos y empleadores.
El gobierno pretende completar los detalles en el próximo mes con los empleadores, sindicatos y expertos e incluir los planes en un paquete de reforma laboral más amplio que se presentará al parlamento el próximo mes.
Las empresas también tendrán que ser más transparentes con respecto a sus diferencias salariales de género: se les exigirá publicarlas en sus sitios web e internamente los sindicatos tendrán acceso a los datos por rol de trabajo y antigüedad.
El plan del gobierno se encontró con la preocupación entre los empleadores que asistieron a la presentación de Philippe.
“La carga adicional no debe ser contraproducente, desactivando a los empresarios”, dijo Jean-Michel Pottier, vicepresidente de la federación de pequeños empresarios de CGPME.
Los líderes sindicales que asistieron a la presentación de Philippe estaban abiertos al plan del gobierno, pero algunos también tenían reservas sobre qué criterios se utilizarían para determinar si existía una brecha salarial.
