Francisco Cervantes Díaz, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), afirmó que las aduanas llenan las papeletas a mano por las fallas en los sistemas para atender las exportaciones e importaciones de México a Estados Unidos y al mundo.
“Hay un protocolo de llenar las papeletas a mano, porque a los sistemas le dieron un mantenimiento y tuvieron alguna falla”, comentó.
El representante del organismo cúpula dijo que van 36 horas del cierre de aduanas, y que habló con el administrador de aduanas, el general André Foullon, para conocer más a detalle las fallas.
“Ya se reabrió la aduana de Nuevo Laredo y están abriendo paulatinamente”, afirmó en el marco de la presentación de la iniciativa “20 ideas para México: propuestas y acciones para transformar y prosperar juntos” por parte del Consejo de Empresas Globales.
Cervantes Díaz comentó que se reunirá el martes para compartir los protocolos con los sectores más primordiales, y con el mayor número de cruces.
“Ya todo es digital y cuando falla es un problema técnico y no es un problema humano, sino es un problema técnico y digital”, detalló.
El dirigente expresó que tendrán una reunión con los principales sectores para calcular las pérdidas: “Imagínense el sector automotriz, uno de las industrias más importantes en las exportaciones y en los cruces”.
La Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo manifestó su “profunda preocupación” ante el caos generado por el fallo informático en los principales puntos aduanales de Tamaulipas, Nuevo León y Chihuahua.
El organismo, encabezado por Héctor Tejada Shaar, espera el restablecimiento total del funcionamiento de los puntos aduanales, y solicitó a las autoridades competentes, en particular a la Agencia Nacional de Aduanas de México y al Servicio de Administración Tributaria, que tomen medidas inmediatas para prevenir nuevas fallos, con el fin de evitar mayores retrasos y pérdidas económicas.
Indicó que esta situación, que ha resultado en la suspensión de operaciones de carga en el Puente Internacional III en Nuevo Laredo, Tamaulipas, y en otros puntos clave de la frontera norte, representa un grave obstáculo para el comercio binacional entre México y Estados Unidos.
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Expresó que la congestión en los pasos fronterizos ha generado pérdidas muy significativas para las empresas mexicanas del sector de comercio, servicios y turismo, especialmente para el autotransporte de carga.
Agregó que mucha de la mercancía paralizada por horas es perecedera, por lo que existen graves consecuencias en la seguridad alimentaria.
Tejada Shaar advirtió que la falta de operación en la frontera norte no solo afecta la actividad comercial entre México y Estados Unidos, sino que también pone en riesgo la competitividad del país como socio comercial clave.
Aún sin cuantificar pérdidas
Hasta el momento, la Concamin no tiene un estimado de las pérdidas para las distintas industrias que se han visto afectadas.
La Concamin y la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM) acordaron elaborar un protocolo de contingencia a fin de evitar estos inconvenientes. Por ello, se reunirán en los próximos días para empezar a trabajar en ese proyecto y tenerlo listo lo más pronto posible.
El problema que surgió en el Puente Internacional afecta principalmente al SAT, porque deja de recaudar una importante cantidad de recursos.
Pero también afecta al comercio internacional, y es por esa razón que la Concamin y la ANAM tendrán un protocolo.
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