Por primera vez la ciudadanía podrá hacer preguntas directas a los candidatos presidenciales en los debates que organizará el Instituto Nacional Electoral (INE) el próximo año y, al estilo de Argentina, los candidatos podrá cuestionarse entre ellos.
El Consejo General del INE aprobó el acuerdo que establece los formatos para los debates presidenciales. Serán tres y se realizarán el 7 y 28 de abril y el 19 de mayo, y uno de ellos se realizará en las oficinas centrales del organismo electoral, mientras los otros dos en sedes distintas, pero en la Ciudad de México.
“Para la selección de las sedes distintas a la del instituto, se privilegiarán recintos que cuenten con los espacios y las capacidades técnicas necesarias para la producción de un debate televisivo, así como universidades e instituciones públicas”, menciona el acuerdo avalado.
Además, habrá un bloque en el que los candidatos se preguntarán entre ellos. Este será la sección de preguntas cruzadas o “cara a cara”. Si son sólo tres candidaturas, cada una tendrá la oportunidad de hacer preguntas de 30 segundos a las otras dos, una por una, que tendrán que contestar en un minuto y medio como máximo, pero si son mas de tres candidatos, se sorteará quién preguntará a quién.
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Sobre las preguntas de la ciudadanía, el INE avaló que pueden ser a través de redes sociales o directas; sin embargo, aprobó que se aclare qué se entiende por esto último.
Los temas de los debates serán los siguientes:
- Seguridad
- Economía y empleo
- Combate a la corrupción y transparencia
- Salud y educación
- Pobreza
- Medio ambiente
- Migración y política exterior
- Atención a grupos en situación de vulnerabilidad
- Política y gobierno
- Violencia en contra de la smujeres
- Política social
- Infraestructura y desarrollo
Este formato de debates puede modificarse una vez que sea del conocimiento de las representaciones de los candidatos, y siempre que existan consenso para hacer adecuaciones.
Durante la discusión de este punto, la consejera Norma Irene de la Cruz estuvo en contra de que en hubiera presencia de público en los debates presidenciales, pues consideró que tener invitados puede ser negativo, por lo que dijo que la ciudadanía puede participar en estos ejercicios mandando su pregunta.
“La realización de debates entre candidatura a la presidencia de México sin la presencia del público ofrece una oportunidad para centrar el dialogo en ideas y propuestas, fomentando el ambiente más reflexivo (…) Tenemos las experiencias de los debates en el Estado de México y Coahuila, donde nos dijeron que tener invitados puede tener un efecto negativo. La ausencia del publico en el debate no implica desvincular a la ciudadanía; de echo es otro espacio si tenemos el mecanismo para que las preguntas de la ciudadanía se hagan llegar ,a este debate”, dijo.
En la misma posición estuvo la consejera Rita Bella López al señalar que sería “muy complicado” que hubiera un formato “cara a cara”, pues dijo puede dar lugar a confrontaciones en las réplicas y contrarréplicas y a que las preguntas que se generen versen solo en descalificaciones y no temas de interés de la ciudadanía.
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