La decisión de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) de elevar la tasa clave de interés fue unánime, ya que a todos sus integrantes les preocupa las futuras elecciones presidenciales en Estados Unidos, pero también el debilitamiento en las finanzas públicas, el cual observan como uno de los factores que han influido en la depreciación del peso. De acuerdo con las minutas de la reunión más reciente publicadas este jueves, los cinco integrantes votaron a favor de elevar a 4.75% la tasa de interés interbancaria a un día, tomando en cuenta un deterioro en el balance de riesgos para la inflación en el corto plazo. “La mayoría subrayó la relevancia de transmitir el mensaje de que la Junta de Gobierno continuará dando un seguimiento cuidadoso a todos los determinantes de la inflación para responder oportunamente en caso de que pudieran poner en peligro el cumplimiento del objetivo del banco”, indicó el documento. Te puede interesar: Banxico y alza de tasas, ¿decisión correcta? Sobre las preocupaciones internas, el texto señala que uno de los miembros de la junta notó que se han observado persistentes y elevados requerimientos financieros del sector público y un acelerado crecimiento de la razón deuda pública a PIB en los últimos años. Como consecuencia de lo anterior, la mayoría de los miembros subrayó que “ciertos indicadores de primas de riesgo se han estado incrementando” y uno de ellos mencionó que “estos incluso se sitúan por encima de los de otras economías con igual calificación crediticia”. Para algunos miembros, la percepción de fragilidad fiscal se confirma con las advertencias emitidas este año por agencias calificadoras, como Moody’s y Standard & Poor’s, que en los últimos meses recortan su perspectiva a negativa de la nota del país. Lee también: Intervención del peso, solo en circunstancias excepcionales: Banxico “Como factores internos adicionales, algunos integrantes destacaron que la ampliación del déficit en la cuenta corriente también ha incidido en el debilitamiento del peso, sin bien en menor medida, y un miembro añadió como factor adicional la falta de plena información sobre el plan de negocios de Pemex”. Ante los riesgos señalados durante esta reunión, y considerando que el entorno externo e interno que enfrenta la economía nacional se podría complicar, los miembros enfatizaron la necesidad de fortalecer los fundamentos macroeconómicos de México, e incluso uno de ellos dijo que esto es cada vez más necesario. “La mayoría de los integrantes coincidió en que las medidas de consolidación fiscal que han sido propuestas en el paquete económico presentado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público al H. Congreso de la Unión van en la dirección correcta”, apuntó el documento. Pero también indicó que con el paquete fiscal propuesto “se prevé alcanzar un superávit primario a partir de 2017 y estabilizar la razón de deuda pública a PIB también a partir de ese año, lo que permitirá absorber choques del exterior de manera más eficiente y propiciar mejores saldos de la cuenta corriente. Uno señaló que, de cumplirse estas acciones, sería un primer paso hacia una estabilización y un cambio de tendencia más definitiva en el saldo de la deuda”. Aquí puedes leer el documento: Minutas de reunión del 29 de septiembre

 

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