El 22 de diciembre de 2022, la comprensión que el mundo tenía de TikTok cambió. El gigante de las redes sociales admitió que un equipo de empleados de su empresa matriz, ByteDance, con sede en China, había rastreado la ubicación de los periodistas, incluido este reportero, apenas tres meses después de que Forbes informara sobre sus planes para vigilar a los ciudadanos estadounidenses.
Fue una prueba concreta de algo que los legisladores estadounidenses han temido durante años: que TikTok pudiera usarse para espiar a los estadounidenses. Al gobierno de Estados Unidos le preocupa desde hace mucho tiempo que el gobierno chino pueda exigir a ByteDance que utilice TikTok para vigilar a los estadounidenses o tratar de influir en nuestro discurso cívico. Hoy, la Cámara de Representantes aprobó un proyecto de ley que requeriría que ByteDance se deshaga de TikTok o, si se niega, prohibiría la aplicación en los Estados Unidos, y el presidente Biden ha dicho que firmará el proyecto de ley si tiene la oportunidad de hacerlo. . Si eso sucederá ahora está en manos del Senado, donde los legisladores debaten entre bastidores si deben presentar y aprobar una medida equivalente o no.
TikTok ha caracterizado el proyecto de ley como una prohibición directa, en lugar de un requisito de desinversión, tal vez porque la última vez que ByteDance intentó vender TikTok, el gobierno chino hizo valer su poder para bloquear la venta. El miércoles, el portavoz del gobierno chino, Wang Wenbin, expresó su objeción al proyecto de ley y acusó al gobierno estadounidense de socavar la competencia.
En los últimos dos años, Forbes ha revelado una y otra vez cuán profundos son los vínculos de TikTok con su empresa matriz china, ByteDance, que sigue en deuda con el gobierno chino, y cómo eso podría representar un riesgo para la seguridad nacional.
En el verano de 2022, BuzzFeed News informó que la información privada de los usuarios de TikTok era ampliamente accesible para los empleados de ByteDance en China, y que se había utilizado otra aplicación de ByteDance para enviar propaganda china a personas en los Estados Unidos (ByteDance negó que esto hubiera ocurrido). Desde entonces, Forbes ha informado que el Departamento de Justicia de Estados Unidos abrió una investigación criminal contra ByteDance por su vigilancia a periodistas. Reveló que ByteDance había monitoreado conversaciones sobre temas sensibles para el gobierno chino, utilizando más de 200 listas de “palabras sensibles” para hacerlo.
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Además, a pesar del testimonio contrario del director ejecutivo Shou Zi Chew, Forbes reveló que la compañía ha seguido guardando algunos datos sobre sus usuarios estadounidenses (incluidos muchos de sus influencers más populares) en China. Esto llevó a algunos legisladores a acusar a Chew de perjurio y solicitar que el Departamento de Justicia abriera una investigación sobre su testimonio.
Las preocupaciones sobre TikTok han sido en gran medida bipartidistas; El expresidente Trump intentó prohibir TikTok por primera vez en 2020. Desde que el presidente Biden asumió el cargo, su administración se ha mantenido escéptica respecto de TikTok, a pesar de la decisión de su campaña de unirse a la aplicación el mes pasado. En marzo de 2023, un panel interinstitucional formado por personas designadas por Biden le dijo a ByteDance que tendría que deshacerse de TikTok o enfrentarse a una prohibición de la aplicación.
Esto marcó un aparente estancamiento en una negociación de años entre TikTok y el gobierno para llegar a un acuerdo de seguridad nacional que impondría restricciones a TikTok, pero permitiría a ByteDance seguir siendo propietario de él, a través de una asociación potencial compleja con Oracle y una iniciativa de secuestro de datos. conocido como “Proyecto Texas”. Forbes fue la primera redacción en informar sobre el contenido del borrador del acuerdo. Pero con este nuevo proyecto de ley, la Administración Biden ha indicado que el proyecto de acuerdo, que otorgaría al gobierno de Estados Unidos un poder sin precedentes sobre la expresión en línea, todavía no es suficiente.
Esta semana, TikTok incitó a sus 170 millones de usuarios estadounidenses a llamar a sus representantes y expresar su oposición al nuevo proyecto de ley de la Cámara. Además, el expresidente Trump cambió de rumbo y se manifestó en contra de la prohibición de TikTok, lo que desbarató la coalición de la Administración Biden. Aún así, con el impulso bipartidista en un nivel inusualmente alto, queda por ver si la reversión de Trump será suficiente para salvar a TikTok.
Este artículo fue publicado originalmente por Forbes US.
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