Reuters.- Las fuerzas ucranianas siguieron empujando hacia el norte en la región de Járkov y avanzando hacia el sur y el este, dijo el domingo el jefe del ejército ucraniano, un día después de que sus rápidos avances hicieron que Rusia abandonara su principal bastión en la zona.
El presidente Volodímir Zelenski celebró el avance ucraniano en la provincia nororiental de Járkov como un potencial avance en una guerra que dura ya seis meses, y dijo que en el invierno boreal podría haber más ganancias rápidas de territorio si Kiev consigue armas más potentes.
“En la dirección de Járkov, empezamos a avanzar no solo hacia el sur y el este, sino también hacia el norte. Quedan 50 kilómetros para llegar a la frontera estatal (con Rusia)”, dijo en Telegram el comandante en jefe de Ucrania, el general Valeriy Zaluzhnyi.
Según indicó, las fuerzas armadas del país han recuperado el control de más de 3,000 kilómetros cuadrados desde principios de este mes.
En Moscú, el Ministerio de Defensa ruso dijo el domingo que las fuerzas rusas estaban golpeando posiciones del ejército ucraniano en la región de Járkov con ataques de precisión realizados por tropas aéreas, misiles y artillería.
La retirada de la ciudad de Izium supuso la peor derrota de las fuerzas rusas desde que fueron expulsadas de la capital, Kiev, en marzo, ya que miles de soldados rusos abandonaron municiones y equipos en su huida.
Los logros son importantes desde el punto de vista político para Zelenski, que intenta mantener a Europa unida detrás de Ucrania -suministrando armas y dinero- en un momento en que se avecina una crisis energética invernal tras los cortes del suministro de gas ruso a los clientes europeos.
“Creo que este invierno es un punto de inflexión, y puede llevar a la rápida desocupación de Ucrania”, dijo Zelenski en comentarios a un foro político publicados en su sitio web a última hora del sábado. “Vemos cómo ellos (los ocupantes) están huyendo en algunas direcciones. Si fuéramos un poco más fuertes con las armas, desocuparíamos más rápido”.
Funcionarios ucranianos se abstuvieron de confirmar la reconquista de Izium, pero el jefe de gabinete de Zelenski, Andriy Yermak, publicó una foto de las tropas en sus afueras y tuiteó un emoji de uvas. El nombre de la ciudad significa “pasa”.
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El Ministerio de Defensa británico afirmó el domingo que las fuerzas ucranianas siguieron ganando terreno en la región de Járkov durante las últimas 24 horas. Sin embargo, los combates continuaron en torno a Izium y Kupiansk, el único centro ferroviario que abastece a la línea del frente rusa en el noreste de Ucrania y que fue retomado por las fuerzas de Kiev.
Cuando la guerra entraba en su día 200, Ucrania informó de más ataques rusos con misiles y aéreos durante la noche y los funcionarios regionales informaron de fuertes bombardeos rusos en el este y el sur.
El gobernador de la provincia oriental de Donetsk, Pavlo Kyrylenko, dijo en Telegram que 10 civiles murieron durante la noche. Más al sur, nueve resultaron heridos en la ciudad de Mykolaiv, dijo su alcalde.
Reuters no ha podido confirmar de forma independiente los relatos del campo de batalla.
ZAPORIYIA INTERRUMPE ACTIVIDAD
Mientras los combates arreciaban, las condiciones de la mayor central nuclear de Europa seguían siendo motivo de preocupación mundial. Rusia y Ucrania se acusan mutuamente de bombardear los alrededores de la central de Zaporiyia y de arriesgarse así a una liberación catastrófica de radiación.
El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) dijo que se logró restablecer una línea eléctrica de reserva a la central controlada por Rusia, lo que le proporciona la electricidad externa que necesita para enfriar sus reactores y defenderse del riesgo de una fusión.
La agencia estatal Energoatom, por su parte, dijo que detuvo las operaciones en la planta como medida de seguridad, ya que la línea restaurada a la red permitió que la planta fuera alimentada por el sistema energético de Ucrania.
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El miércoles, Kiev había instado a los residentes de las zonas ocupadas por Rusia en los alrededores de la planta a evacuar por su propia seguridad.
La crisis energética del continente amenaza con erosionar la unidad europea en torno a Ucrania y Kiev necesita demostrar que no sólo puede resistir el asalto de Moscú, sino que también puede inclinar la balanza a su favor.
Zelenski dijo el sábado en una conferencia a la que asistió la ministra de Relaciones Exteriores de Alemania que Moscú estaba haciendo “todo” para romper la determinación ucraniana y europea.
“Por delante hay 90 días que determinarán más de 30 años de independencia de Ucrania. Noventa días que, más que todos los demás años, determinarán la existencia de la UE. El invierno determinará nuestro futuro”, dijo.
Las fuerzas rusas utilizaron Izium como base logística para una de sus principales campañas: un asalto de meses desde el norte a la región adyacente del Donbás, que comprende Donetsk y Lugansk.
El Ministerio de Defensa ruso ordenó a las tropas que abandonaran las inmediaciones y reforzaran las operaciones en otros lugares de Donetsk, informó el sábado la agencia estatal de noticias TASS.
El jefe de la administración rusa en Járkov pidió a los residentes que evacuaran la provincia y huyeran a Rusia para “salvar vidas”, informó TASS. Los testigos describieron atascos de autos con gente abandonando el territorio controlado por Rusia.
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