Adina Chelminsky, emprendedora mexicana, co-fundadora y directora de Business Inteligence de Feedbox México, experta en finanzas personales y emprendedurismo, autora de 4 libros bestsellers y más de 5,000 artículos.   ¿Sabías qué el 79% de los consumidores mexicanos están dispuestos a pagar más por un servicio de excelencia, mientras que el 63% están dispuestos a probar una nueva marca con tal de tener un mejor servicio? Está comprobado que los clientes satisfechos le platican a 6 personas, mientras que los clientes insatisfechos le platican a 15 personas, por lo que, en promedio, los negocios pierden entre el 10-30% de su clientela cada año. El problema es que el 96.7% de los clientes insatisfechos nunca dan a conocer a la empresa su molestia y sólo el 49% de ellos, regresan a una empresa si tienen evidencia de que el servicio ha mejorado. Por eso, Feedbox México se enfrentó a un reto muy interesante: dedicarse a ofrecer soluciones empresariales para medir la satisfacción y lograr que las empresas escuchen a sus clientes en tiempo real. Feedbox México, empresa mexicana de capital privado, forma parte de un grupo internacional con presencia en Estados Unidos, Inglaterra, Singapur e Israel. Abrió sus puertas en enero de 2011, con una oficina llena de sueños, proyectos y tan sólo con 3 personas: Adina, su socio Abraham y una asistente-hada madrina. Hoy, 18 meses después, Feedbox México emplea a 10 personas y tiene clientes de la talla de Wal-Mart, Comex, Bridgestone y Círculo K.   Emprender, un doble reto para las mujeres Adina Chelminsky siempre pensó que hablar de negocios desde la perspectiva de género era algo passe sino es que cliché. Adina es, o por lo menos se sentía, miembro de una generación de mujeres enfocadas, estudiadas y ambiciosas que poco habían enfrentado las diferencias entre hombres y mujeres en el mundo real laboral. Un buen día, decidió emprender y se dio cuenta que en el mundo del emprendedurismo, si bien no existe un techo de cristal, sí existen muchas estalactitas en el camino, por lo que le quedó claro que emprender es un doble reto para las mujeres porque implica enfrentar los retos particulares en el ámbito de los negocios y, también, en el frente personal. Irónicamente, las mujeres en otros países del mundo son el grupo social en donde el emprendimiento más crece. Cansadas de la poca flexibilidad en el ambiente laboral formal/empresarial, muchas mujeres eligen abrir una empresa propia como la llave para tener una vida más equilibrada y con mayor flexibilidad, pero, ¡oh, sorpresa!: muchas se dan cuenta que la responsabilidad autoimpuesta de manejar el propio negocio, muchas veces absorbe y angustia mucho más que cuando lo haces en el negocio de otros. “Sin duda alguna volvería a elegir el camino del emprendedurismo una y mil veces más”, me dice Adina con mucha certeza. De todos modos, le pregunto: —¿Qué hubiera pasado si supieras todo lo que sabes ahora? — Me hubiera encantado haber iniciado el negocio con los ojos más abiertos, sopesando mejor los costos y las expectativas; las mujeres y los hombres podemos ser iguales en cuestión de capacidades, pero es innegable, por lo menos en mi caso, que las mujeres, por lo menos durante cierta etapa de la vida, necesitan combinar sus responsabilidades de casa/hijos con las laborales.   —Entonces, ¿se puede tener éxito en el mundo del emprendedurismo siendo mamá? —Definitivamente, pero implica ciertas estrategias especiales.   De financiera a emprendedora con escala en freelancera Su vida laboral comenzó en BBVA Bancomer, haciendo análisis de entorno de inversión, labor que combinaba con el periodismo financiero. A la fecha tiene más de 5,000 artículos publicados en diversos medios sobre temas de finanzas personales. Para Adina, era más fácil saber cuál era el precio del barril de petróleo que aprender a elaborar un presupuesto personal que funcionara, pero sinceramente, ¿quién de nosotros necesita comprar un barril de petróleo? Al menos Adina, no. Su interés en las finanzas personales nació por una necesidad propia, ya que aun trabajando en el medio financiero, su vida monetaria personal era un verdadero desastre: cheques devueltos, ahorro nulo y tarjetas de crédito pidiendo misericordia. Se dio cuenta que toda la gente que la rodeaba (financieros o no) padecían de los mismos problemas y dudas. En el momento que su ciclo en el banco acabó, abrió una empresa de asesoría en finanzas personales para gente “común y corriente”, labor que combinaba con conferencias en todo el mundo sobre temas de finanzas personales. Nunca dejó de estudiar, continuó preparándose en estudios de finanzas conductuales. Adina ha publicado 4 libros bestsellers: Cómo Manejar Tu Dinero… Sin Enloquecer en el Intento de 2007, Cabrona y Millonaria de 2009, Cabrona al Borde de un Ataque de Nervios de 2011 y el más reciente ¿Y Cómo Chingaos le Hago? de 2013. Por azares del destino, en octubre de 2010, se le presentó la oportunidad de abrir, junto a tres socios, un negocio propio, Feedbox México. El tipo de negocio era difícil de resistir. Desde que empezó a desarrollar el negocio, perdió el sueño: “En las noches hacía listas y planes de ideas”. Mediante un joint venture con una empresa israelí, desarrollaron un sistema tecnológico y de inteligencia de negocios para dar asesoría a empresas y poder medir la satisfacción del cliente en punto de venta y la calidad del ambiente laboral. “Pensé que era el trabajo ideal: siendo mi propia jefa, me iba a poder organizar mejor, trabajando de medio tiempo en la oficina y el otro tiempo desde la casa para poder compaginarlo con mi responsabilidad de mamá.”   De mujer al borde de un ataque de nervios al emprendedurismo zen El gran cambio vino en el momento de sopesar la enorme responsabilidad que el negocio implicaba. “De ser mi propia jefa, sin necesidad de rendirle cuentas a nadie, de repente me enfrenté a la responsabilidad ante mis empleados y ante los socios que habían invertido su dinero y confianza en mí.” El medio tiempo se volvió de 8 am a 8pm, sábados y domingos. El énfasis en sacar el negocio a flote era tal que las prioridades y los límites entre trabajo y casa empezaron a revolverse: “Empecé diciendo, sólo de aquí a marzo voy a trabajar con estos horarios, pero, marzo se volvió mayo, mayo de 2012 se convirtió en mayo de 2013, por lo que estaba a punto de una crisis nerviosa”, recuerda. Y continúa: “El negocio caminaba, pero yo ya no. Me carcomía la culpa de las horas que le estaba dedicando al negocio a costa de mis hijos. Salirme del negocio para asistir a alguna junta me rompía el día, y lo peor es que llegaba a la casa con tantas cosas en la cabeza que estaba ausente y, francamente, de mal humor. Un día, en medio de una literal crisis nerviosa, me di cuenta que no podía yo seguir así.” La lección que aprendió mes clara: “El mejor emprendedor es el que le dedica todo el trabajo del mundo (porque es lo que un nuevo negocio implica), pero que no olvida su vida personal. No creo que sea una cuestión de género exclusivamente. Para algunos serán sus hijos, para otros correr un maratón, para otros realizar alguna actividad social. En los nuevos negocios, el activo más importante es el emprendedor, de la misma manera en que aceitas las máquinas o das mantenimiento al sistema, el emprendedor necesita de una alineación y balanceo constante.”   Lecciones emprendedoras de Adina:
  1. No sólo de sueños viven las empresas, sino de realidades. La realidad más importante son las finanzas sanas: costea correctamente, factura a tiempo, presiona la cobranza y cuida los gastos.
  2. Aprende a delegar: Nadie puede hacer todo por sí sólo. El no delegar genera un círculo vicioso porque la gente no aprende lo que debe aprender, y por eso no delegas, y por eso no aprende.
  3. Papelito habla: Ya sea en la relación con tus socios, con tus proveedores, con tus clientes y con tus empleados, que todos tus compromisos (y los de ellos) estén por escrito para que no existan malos entendidos que se conviertan en grandes problemas.
  4. Crea redes de apoyo: Cada vez más, un mayor número de mujeres trabajamos, crea redes de apoyo con otras mujeres en situaciones similares que se puedan apoyar mutuamente en responsabilidades personales.
  Recomendaciones:
  • Libro: Different: Escaping the competitive herd de Youngme Moon.
  • Cita: “Profit is an opinion, cash is a fact.” –Warren Buffett.
  Agradezco su tiempo y lectura. Espero que esta historia tan fascinante acerca de una gran mujer emprendedora mexicana rompa paradigmas y les inspire a llegar más lejos. Espero sus comentarios. Muchas gracias.     Contacto: Facebook: facebook.com/stephanielewiss Twitter: @yameroenForbes E-mail: [email protected]

 

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