DW.- El gobierno en Berlín revisó a la baja su previsión coyuntural para 2020 y ahora vaticina una contracción del 5.8% del Producto Interno Bruto (PIB) para este año, frente al 6.3% inicialmente previsto.
“La recesión del primer semestre es menor de lo que temíamos y el rebote (…) es más rápido y dinámico de lo que esperábamos”, explicó el ministro de Economía, Peter Altmaier.
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En una conferencia de prensa, también aseguró que Alemania “puede y evitará” un segundo confinamiento por el coronavirus.
Tasa de desempleo estable en agosto
Por su parte, la tasa de desempleo en Alemania permaneció estable por segundo mes consecutivo, en 6,4% en agosto, tras la fuerte alza debido a la pandemia de COVID-19, según datos estacionales corregidos.
El número de desempleados se redujo en 9.000 en un mes, según la Agencia Nacional del Empleo. En junio, el mes más reciente sobre el que existen datos disponibles, el número de personas en desempleo parcial bajó a 5,36 millones desde los 5,82 millones de mayo y los 5,98 millones de abril. Antes de la crisis sanitaria, la tasa de desempleo se situaba en el 5%. Tras subir, desde junio se ha estabilizado en 6,4%.
En datos brutos, el número de desempleados aumentó en 45.000 con relación a julio, para alcanzar los 2,96 millones de personas. “El desempleo aumentó en agosto de forma habitual y no hemos visto un alza adicional por el nuevo coronavirus”, dijo Detlef Scheele, presidente de la Agencia para el Empleo.
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“No obstante, el impacto de la pandemia en el mercado del empleo es muy obvio”, agrega. Como el conjunto de los países europeos, la economía alemana fue duramente golpeada por la crisis del nuevo coronavirus, ya que las restricciones para luchar contra la pandemia paralizaron prácticamente todo el aparato productivo del país entre mediados de marzo y mayo.
Alemania recurrió masivamente al desempleo parcial, que ya había limitado el impacto en el empleo en la crisis de 2009.
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