En 2012, México llegó a tener de las inversiones más altas para el sector minero, situándose en el primer lugar de competitividad en Latinoamérica; el año pasado se situó en el número 42, bajó cuatro posiciones en relación a 2019. Son varios factores los que están minando la competitividad del país, de acuerdo con datos del sector.

El desaliento para invertir en México obedece a una mayor incertidumbre por la postura de la nueva administración, falta de certeza jurídica, la inseguridad, a esto se agrega la imposición de nuevos derechos en 2014 y el no poder deducir los gatos de exploración en el mismo año en el que se efectúan, dijo esta industria.

Sergio Almazán Esqueda, presidente de la Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México (AIMMGM) durante su ponencia en el Seminario de Periodistas en el marco de la XXXIV Convención Internacional de Minería, explicó que si bien las inversiones a escala mundial han caído en la parte de exploración, que es la más importante, en México ha caído más que en otros países.

En 2020, la inversión en exploración fue de 399 millones de dólares que, comparada con 2012 es una caída de 65%.

Las posturas y acciones de la administración de Andrés Manuel López Obrador que están restando confianza y certeza jurídica al sector son: no otorgar más concesiones, la eliminación de la subsecretaría de Minas que tenía la Secretaría de Economía, la dilución del Fondo Minero (transferido a la Secretaría de Educación Pública), explicó.

Y recientemente, se agregó la iniciativa de reforma eléctrica que contempla que el litio deje de ser concesible y ser exclusivo del estado, así como demás minerales estratégicos, para la transición energética.

Almazán Esqueda consideró que se necesita trabajar con las autoridades para posicionar al sector minero como un aliado estratégico del estado y no continuar perdiendo competitividad.

Mitos en la minería

El presidente de la AIMMGM también se refirió a una serie de mitos que rodean al sector minero en México, por ejemplo, se dice que no paga impuestos, pero tan sólo en los últimos cinco años en ISR aportó 161,390 millones de pesos y por el pago de derechos han sido 32,881 millones.

Otro es que 60% del territorio mexicano está concesionado, no obstante de 196 millones de hectáreas que tiene el país de superficie, son 16.8 millones las que están concesionadas.

En cuanto a una poca seguridad industrial mencionó que, el sector se ubica por debajo de la media nacional con respecto a la tasa de incidencia  de accidentes del IMSS.

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Son muchos los desafíos que enfrenta el sector minero, donde lo más importante es no seguir perdiendo competitividad y para esto se necesitan importantes inversiones, sujetas a la volatilidad de los precios de los metales y los minerales con altos riesgos geológicos y técnicos, consideró.

Es imprescindible no cambiar las reglas del juego y generar una política clara de largo plazo, evitar bloqueos y toma de instalaciones que se hacen de manera ilegal, así como erradicar las extorsiones y robo de insumos y productos mineros, agregó.

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