Cuatro gobernadores estatales y la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) han solicitado al gobierno de Andrés Manuel López Obrador actualizar el pacto fiscal, al considerar que este mecanismo de asignación de recursos no es justo ni equitativo.
Sin embargo, la disputa podría tener un trasfondo político en el marco de la emergencia sanitaria provocada por la propagación del coronavirus toda vez que el pacto fiscal está bien aplicado, afirma Guillermo Mendieta, integrante de la comisión de auditoría fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México.
“El 80% de los ingresos correspondientes a los impuestos federales se entregan a la federación con el afán de que este mismo reparta a cada uno de los estados bienes, seguridad, servicios transporte, educación que son derechos que cualquier mexicano debería contar”, afirma.
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Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco, advirtió que abandonaría el pacto fiscal toda vez que el estado que gobierna es uno de los que más aporta a la federación pero no recibe la misma cantidad de dinero.
También se pronunciaron por esta vía Jaime Rodríguez Calderón “el Bronco”, gobernador de Nuevo León; Francisco Cabeza de Vaca, de Tamaulipas; y Miguel Ángel Riquelme, de Coahuila; al señalar como injusto el pacto fiscal para estados que son grandes productores como esos.
A través de un comunicado, la Coparmex solicitó al gobierno federal llevar a cabo una convención nacional hacendaria para revisar el pacto toda vez que los gobernadores que demandan más presupuesto para poder operar y atender a sus respectivas poblaciones en la emergencia sanitaria.
A través del pacto fiscal, que data de 1978, se recaudan los impuestos federales, es decir, el Impuesto al Valor Agregado (IVA), el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), en tanto que alrededor de 80% de los recursos recaudados se destina a la federación y el restante a los estados.
“Ese dinero se utiliza para la suma del PIB, planes económicos para el beneficio de los mexicanos en su totalidad y no en cada estado.
“Los gobernadores que hacen énfasis en ese tema en particular, al menos Jalisco y Nuevo León son dos de las entidades más grandes después de CDMX, tanto en gente como en generación de riqueza en términos de empresas”, explicó Mendieta.
