Hoy en día, términos tecnológicos como Inteligencia Artificial (IA) y Blockchain son tan ubicuos que ha permeado en prácticamente todos los ámbitos de nuestra vida cotidiana, a tal grado que se ha sacudido la mala fama que le habían dado las películas y la literatura de ciencia ficción al desarrollo tecnológico.  

En lo personal siempre me ha gustado ver el ángulo positivo de las cosas,  la tecnología en realidad sirve para facilitarnos algunas tareas o procesos en cuestión de tiempo, dinero, esfuerzo y seguridad.

Lo interesante de la conjunción de  tecnología e innovación es que sus aplicaciones van automejorando y, en mi ramo, que es la Propiedad Intelectual e Industrial, el Blockchain -también conocida como cadena de bloques- y la Inteligencia Tecnológica e Inteligencia Artificial son de gran utilidad, pues ayudan a disminuir  el margen de error al momento de comprobar la patentabilidad o el registro de alguna invención o marca; específicamente, Blockchain, nos brinda un registro completo con información precisa de cuándo se llevó a cabo la invención, innovación o contenido o en qué parte de la investigación nos encontramos.

Para hacer una división sencilla, la Inteligencia Artificial se encuentra más hacia el cuadrante de búsqueda, de vigilancia, de inteligencia tecnológica; mientras que Blockchain se ubica más hacia llevar el registro de las invenciones, contenido o los avances en desarrollo de los mismo. Por ende,  pueden complementarse a lo largo de todo el ciclo de innovación y no solo para la protección.

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

De hecho, mediante la vigilancia tecnológica, podemos realizar búsquedas detalladas y específicas que nos darán información valiosa, viabilidad de invención, guía hacia para la definición de la estrategia comercial y económica, que son fundamentales para la toma de decisiones de las empresas. Por otro lado, se puede hacer una búsqueda en contenido no estructurado –es decir, frases, imágenes, logotipos, entre otros–, con el fin de proteger al cliente y rastrear una posible infracción de marca que, en caso de existir, permita la toma de acciones legales para ver cómo combatirlo. 

Gracias a la tecnología , los procesos se han vuelto casi inmediatos , y permiten que nuestra industria sea más innovadora y ágil, a la vez que nos ayuda a democratizar y expandir el uso de la Propiedad Industrial para que más empresas o emprendedores gocen de sus beneficios a largo plazo.

Ahora bien, el uso de estas tecnologías, como lo comenté, va más allá de la mera protección, pues su papel es el de una herramienta, prácticamente indispensable, para la gestión y la toma de decisiones estratégicas de las empresas, debido a que les brinda información técnica que pueden emplear para llegar al mercado preparados de la mejor manera.

 Actualmente y a pesar del gran avance que las empresas han tenido en los últimos años en transformación tecnológica, 3 de cada 10 compañías utilizan las herramientas de Propiedad Industrial, principalmente por el desconocimiento de su gran potencial.

Sigue la información sobre la economía y los negocios en Forbes México

Si echamos un vistazo a la categoría de patentes, para la protección de innovaciones, vemos que el 70% de las solicitudes en México [1]son denegadas por falta de elementos que fácilmente pudieron haber sido solucionados mediante este tipo de estudios de vigilancia tecnológica. Incluso si comparamos lo que muchas entidades invierten en el desarrollo de tecnología o proyectos tecnológicos, su valor es superior al costo de un estudio de este tipo.

Como representante de una empresa dedicada a la industria de Propiedad Industrial, nuestro objetivo es proteger los intereses de los innovadores y creadores al ofrecerles prerrogativas en relación con sus creaciones, para que el titular de las mismas goce del derecho exclusivo a impedir que su invención sea explotada comercialmente por terceros, y, sobre todo, que vean que pueden formar un modelo de negocio con sus activos intangibles que la PI les ofrece.

Tan fieles somos a nuestro ideal, que uno de nuestros casos de éxito fue nuestro apoyo para determinar si un proyecto de investigación científica de la Universidad Politécnica de Pachuca, cuyo objetivo era generar una mayor comprensión de la estructura del virus SARS-CoV-2 era sujeto a patentabilidad pues se cree que la investigación permitirá desarrollar diagnósticos, medicamentos y vacunas para apoyar a combatir el virus, pero, sobre todo, a la contención de posibles futuras pandemias.

¿Se imaginan?  Gracias al avance tecnológico y a la implementación de Blockchain para la elaboración de un registro de evidencia y por ende, apoyar a la protección de las  invenciones, éste y muchos más proyectos mexicanos podrían llegar a transformar los problemas sociales que actualmente el ser humano se encuentra descubriendo.

La tecnología llegó para quedarse, veamos el lado positivo, aprovechemos todos los beneficios que nos ofrece y evolucionemos con ella. Lo mejor que pueden hacer las compañías es adoptarlas a lo largo de todo su ciclo de innovación y, aunque en México y Latinoamérica aún nos queda un largo camino que recorrer, estamos listos para el futuro que promete buenas perspectivas a corto, mediano o largo plazo.

Suscríbete a Forbes México


[1] Directa del experto Jorge Carpinteyro, Director de Consultoría de ClarkeModet México

Contacto:

Lorena Rodríguez, Directora General de ClarkeModet México*

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

Siguientes artículos

El segundo año de la 4T
Por

Al cumplirse el segundo año de la protesta formal del presidente López Obrador hay varios interrogantes sobre el desempe...