Por Luis Beltrán
Hemos escuchado hablar ampliamente de la Inteligencia Artificial (IA), pero en otro nivel existe la denominada Inteligencia Artificial Generativa (GenAI), una categoría de la IA que se refiere a modelos capaces de generar contenido nuevo y original, como texto, video o música. Este tipo de herramientas, como es el caso de ChatGPT, han subrayado los desafíos organizacionales que enfrentan las empresas para maximizar su uso.
Sin duda alguna, la IA crea grandes oportunidades, pero también conlleva riesgos que deben mitigarse y gestionarse. Estas amenazas incluyen la ciberseguridad, la privacidad de los datos, el cumplimiento normativo y las expectativas elevadas en cuanto a confianza, seguridad y ética para los procesos y sistemas impulsados por la IA.
GenAI: actuar ahora o analizar para después
En este contexto, y de acuerdo con los resultados de la última edición del EY CEO Outlook Pulse, los líderes a nivel mundial reconocen el potencial de la IA, pero la mayoría se enfrenta a importantes desafíos para formular y ejecutar estrategias relacionadas. Asimismo, se percibe la necesidad de actuar rápidamente en la GenAI para evitar dar a sus competidores una ventaja estratégica; no obstante, los directivos afirman sentirse obstaculizados por la incertidumbre en este espacio, lo que dificulta la toma de decisiones rápidas.
El potencial de GenAI para reinventar la forma en que las empresas operan no puede ser ignorado, y los CEO están invirtiendo en la tecnología para consolidar sus ventajas competitivas e innovar en sus organizaciones. Saben que las empresas con capacidades genuinas de GenAI pueden convertirse en aliados o adquisiciones revolucionarias, pero la tendencia a engrandecer las capacidades de la IA puede llegar a nublar su visión del panorama.
Invertir en un futuro habilitado por la IA no es tan fácil como parece, ya que, para financiar estas inversiones, las organizaciones están reasignando capital de otros proyectos o presupuestos tecnológicos, o bien, buscando nuevos capitales. Aunado a ello, el rápido avance en el progreso de GenAI es el mayor desafío para tomar decisiones de asignación de capital en este tipo de iniciativas.
Cómo mantener a los humanos en el centro
Por otra parte, para aprovechar el potencial de la IA se necesita la aceptación y adopción humana. La encuesta EY Work Reimagined 2023 destaca un tipo diferente de brecha de talento: una disparidad emergente de expectativas entre líderes y empleados, donde los líderes tienen expectativas significativamente más altas sobre las mejoras que traerá la IA. En este sentido, exponer a los empleados a GenAI puede ayudar, ya que los sectores con una mayor adopción también perciben más beneficios de la tecnología. Sin embargo, los líderes clasifican la capacitación en GenAI en el noveno lugar de once posibles prioridades de desarrollo para empleados.
A más largo plazo, la oportunidad es llenar un tipo diferente de brecha: entre las funciones de Talento y Tecnología de la Información (TI) actuales y las funciones de Talento y TI potenciadas por la IA del futuro. Si la IA cumple con su potencial, podría ser tan transformadora como lo fue la computadora personal en las últimas cinco décadas o el internet en las últimas tres décadas, potenciando la productividad, desatando la innovación y generando nuevos modelos de negocios.
La incertidumbre y las limitaciones de recursos que enfrentan muchas empresas no deben ser razón para la inacción y el retraso. No es demasiado pronto para que los líderes comiencen la transición de lo táctico a lo estratégico y desarrollen una visión a largo plazo para sus empresas.
Contacto:
*Luis Beltrán, Socio Líder de EY Wavespace, Ciudad de México
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