EFE.- El uniforme militar del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, o la bandera firmada por soldados de su país que entregó al Congreso de Estados Unidos forman parte del anecdotario del primer viaje al extranjero del ucraniano desde el inicio de la invasión rusa de su país.

Más allá de la importancia de este viaje y de los misiles Patriot que el Gobierno del presidente de EU, Joe Biden, anunció que va a mandar a Ucrania, si hay algo de lo que se habló en las redes sociales y en los principales medios de comunicación fue de la ropa militar que llevaba Zelenski, y en concreto de su sudadera.

A diferencia de otros líderes extranjeros, que suelen vestir de chaqueta cuando acuden al Despacho Oval, Zelenski fue fiel a su promesa de no quitarse el uniforme militar hasta que acabe la guerra y se presentó ayer con sudadera y pantalones de color caqui ante Biden.

zelenski-biden
Foto: Oliver Contreras / EFE.

Fue tal la atención que despertó que el término “sweatshirt” (sudadera) fue “trending topic” durante horas en Twitter en EU y las cadenas de televisión como la CNN dedicaron minutos y minutos a analizar a lo largo del día el simbolismo de su atuendo.

Otro de los momentos que quedarán grabados de la jornada será el caluroso recibimiento del presidente Biden, quien abrazó por la espalda a Zelenski para acompañarlo al interior de la Casa Blanca.

zelenski-biden
Foto: Oliver Contreras / EFE.

Durante la rueda de prensa que dieron ambos tras su reunión bilateral, el ucraniano hizo alarde de sus dotes cómicas e hizo reír a los periodistas congregados cuando agradeció el envío de baterías antiaéreas Patriot a su país, pero no contento con ello pidió “más”.

Lee: Zelenski propone a Biden un plan de paz que no dañe la soberanía de Ucrania

De la mansión presidencial, Zelenski se trasladó al Capitolio, donde pronunció un discurso ante las dos cámaras del Congreso.

Muchos legisladores iban vestidos con los colores de la bandera de Ucrania (azul y amarillo) y, nada más llegar, el presidente ucraniano recibió una ovación de unos cuatro minutos que únicamente paró cuando la líder de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi, habló para presentarlo.

Zelenski habló desde el atril del hemiciclo con Pelosi y la vicepresidenta Kamala Harris, que estaba allí en calidad de presidenta del Senado, situadas detrás.

El mandatario obsequió a ambas con una bandera ucraniana, que él mismo había recibido el martes de los soldados desplegados en Bakhmut, en la región de Donestk, uno de los puntos donde combaten más intensamente los ejércitos ucraniano y ruso.

La bandera estaba firmada por uniformados ucranianos y Zelenski la entregó a las líderes del Congreso para agradecer la ayuda militar enviada su país.

A cambio, Pelosi le entregó una bandera doblada de EU que estuvo ondeando este miércoles en el Capitolio.

zelenski-capitolio
Foto: Michael Reynolds / EFE.

Zelenski pide al Congreso de EU más ayuda para acelerar la victoria: ‘no es caridad’

El presidente Zelenski subrayó al Congreso estadounidense que su apoyo es “vital” no solo para resistir a la invasión rusa, sino para lograr un “punto de inflexión” en el campo de batalla y para acelerar la victoria.

“Ucrania se mantiene en sus líneas y nunca se rendirá”, prometió ayer en su discurso en una sesión conjunta del Senado y la Cámara de Representantes, donde fue recibido y despedido entre aplausos y ovaciones.

Zelenski acudió al Capitolio tras reunirse en la Casa Blanca con su homólogo estadounidense, Joe Biden, en su primer viaje al extranjero desde el inicio de la invasión rusa en febrero pasado.

En su esperada intervención, que duró una media hora y en la que fue interrumpido varias veces por las ovaciones del hemiciclo, dejó claro que la ayuda concedida no debe verse como una muestra de caridad, sino como una “inversión” en la democracia.

“Su dinero no es caridad. Es una inversión en la seguridad global y la democracia que manejamos de la manera más responsable”, dijo Zelenski en una sesión conjunta del Senado y la Cámara de Representantes de Estados Unidos, hablando en inglés.

“Es una batalla no solo para la vida, la libertad y la seguridad de Ucrania y de cualquier otra nación que Rusia intente conquistar. Esto definirá el mundo en que vamos a vivir”, dijo confiado en que Ucrania ya se ha ganado el apoyo de la gente y ahora debe salir también victoriosa en el frente.

Foto: Michael Reynolds / EFE.

La ayuda estadounidense es crucial para “llegar a un punto de inflexión” en este conflicto, sostuvo Zelenski, que subrayó que “contra todo pronóstico Ucrania no ha caído y está viva y coleando”, pero también que necesita más financiación y armamento para seguir en pie.

“Ucrania nunca ha pedido que soldados estadounidenses combatan por nosotros en nuestro territorio. Les garantizo que nuestros militares pueden operar perfectamente tanques y aviones estadounidenses”, añadió.

Su comparecencia ante las dos cámaras parlamentarias llega en plena negociación de los presupuestos estadounidenses para el año fiscal 2023, que incluyen unos 45,000 millones de dólares en asistencia a Ucrania.

Estados Unidos ya había dejado claro este martes que su estrategia de ayuda no pasa por enviar tropas, sino por mandar equipamiento militar, suministros y armamento sofisticado por valor de decenas de miles de millones para que los ucranianos se defiendan por sí mismos.

Ayer mismo, anunció un nuevo paquete de ayuda militar de 1,850 millones de dólares y que por primera vez incluye el sistema de defensa antiaérea Patriot de largo alcance, que Kiev había pedido insistentemente para interceptar los misiles rusos que han destruido infraestructuras clave en Ucrania.

El Partido Republicano, sin embargo, asumirá el control de la Cámara Baja en enero y algunos de sus miembros han cuestionado que Estados Unidos deba continuar dando ayuda militar a ese país ante el alto costo que tiene para las arcas federales.

“Ucrania, Estados Unidos y todo el mundo libre estamos unidos”, añadió el mandatario ucraniano, dejando claro que su país “pondrá en su lugar a quienes desafíen la libertad” y que el apoyo extranjero les ayudará a acelerar su victoria.

En su discurso, emotivo pero conciso, no dudó en calificar a Irán de socio de la “política genocida” de Rusia, pero hizo hincapié igualmente en que “Ucrania no tiene miedo y el resto del mundo tampoco debería tenerlo”.

El propio Zelenski desplegó una bandera de su país al acabar su discurso, y la colocó detrás de él y delante de la vicepresidenta de EU y de la presidenta de la Cámara de Representantes, para concluir deseando una feliz Navidad y un “feliz y victorioso año nuevo”.

“Es un gran honor estar aquí”, recalcó Zelenski en esta visita exprés, fraguada en una llamada telefónica con Biden el pasado 11 de diciembre, y en la que agradeció de forma constante a Estados Unidos tanto el apoyo ya brindado y prometido como que hayan conseguido unir a la comunidad internacional a su favor.

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

 

Siguientes artículos

Zelenski armas occidente Ucrania
Nancy Pelosi recibe a Volodímir Zelenski en el Capitolio
Por

Luego de visitar al presidente Joe Biden en la Casa Blanca, el mandatario ucraniano hizo una segunda parada en el Capito...