Menos del 1% del gasto en contratos de las licitaciones que se realizan tanto en el sector público como en el privado se otorgan a empresas que pertenecen mayoritariamente a mujeres, lo que pone en evidencia lo invisibles que son para las cadenas de valor, dice Ixchel Alcántara, directora regional para Latinoamérica y el Caribe de la organización WEConnect International.
Como una de las cabezas en la organización dedicada a conectar a mujeres empresarias con los responsables de compras de compañías internacionales, Alcántara lamenta la poca integración de las mujeres en las grandes transacciones empresariales y de los gobiernos.
Expone que en los hogares, las mujeres deciden la mayoría de las compras y a pesar de ello no son integradas en las empresas para aportar ideas en la comercialización de productos y servicios.
“Yo pensaría que estas empresas que le venden a mujeres productos como maquillaje, productos para bebé o de higiene personal deberían tener más integrada esta visión en sus proveedoras, para que les brinden soluciones para el mercado, pero no es así”, dice Alcántara en entrevista.
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Asimismo, resalta otras barreras que enfrentan las mujeres emprendedoras y empresarias.
Por principio, asevera, “las mujeres tenemos una carga adicional de cuidados en el hogar, 4 o 5 horas más que los hombres”.
Respecto al financiamiento, resalta que la población femenina necesita tener educación financiera, toda vez que al empezar un negocio, suelen hacerlo con recursos propios, sin acercarse a las opciones de crédito.
“También hace falta una plataforma de financiamiento con enfoque de género, porque quienes otorgan los créditos pueden tener ciertos sesgos inconscientes. Hay que ir educando a quienes están en primera línea con las que están pidiendo el crédito, para que tengan una visión más neutral”, comenta.
En los fondos de inversión, añadió, también se requiere que haya más mujeres participando, ya que ellas entenderían más fácilmente a qué se enfrentan quienes requieren capital semilla.
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Por su lado, la emprendedora Renata Raya considera que en la actualidad ya hay más oportunidades para las mujeres emprendedoras y empresarias.
“Siento que el ecosistema de emprendimiento le está dando mucha fuerza y voz a las mujeres”, comentó en una charla con Forbes México.
Tras haber lanzado hace 7 años la agencia de comercio electrónico Triciclo, y en sus primeros días después de activar su segundo emprendimiento en el ramo financiero y tecnológico, Renata Raya piensa que definitivamente es momento de aprovechar las diversas iniciativas en favor de las mujeres empresarias.
“Hay que aprovechar el contexto actual y aprovechar el apoyo de aceleradoras, de muchos programas de inclusión”, expone.
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Ixchel Alcántara coincide, ya que asegura que a las empresarias les toca vincularse más a su sistema.
“Las empresarias deben buscar redes profesionales de contacto para tener acercamiento a los grandes clientes”, recomendó.
Las mujeres deben recurrir a las cámaras de su industria, a las asociaciones de emprendimiento, para que tengan esta visibilidad, sugirió.
Incluso, lamentó que en el caso de la organización donde labora, tienen relaciones con los compradores de 175 multinacionales, los que cada día consultan el directorio de WEConnect International, mientras en ocasiones no encuentran a las proveedoras necesarias, porque ellas no se enfocan en participar en el directorio ni en estar al pendiente de los recursos de ayuda.
“Tengo licitaciones todos los días, de corporaciones que están con un compromiso de gastar con mujeres empresarias e integrarlas a su cadena de valor, pero a veces nos cuesta encontrarlas”, comenta.
Enlistar en el directorio de WEConnect a una empresa propiedad de una mujer es gratuito.
