Ojo en la frontera. Más allá de la manera en que las plantas mexicanas que pertenecen a la cadena de suministro de las industrias automotriz y espacial de EU se reincorporen a la actividad bajo presión de gobierno y grupos cabilderos del país del norte, hay preocupación por la manera en que se han endurecido las revisiones para los exportadores mexicanos de alimentos.
Aunque hay menos flujo en la frontera debido a las acciones coordinadas de EU y México (dejando sólo el tránsito a actividades esenciales), los exportadores de frutas y verduras, por ejemplo, no están de acuerdo en las medidas aplicadas en los puestos de revisión y en bodegas al otro lado.
Y es que el Departamento de Agricultura de EU (USDA) ha endurecido las acciones de control de calidad a productores mexicanos.
Se reporta que las revisiones son excesivas y necias. Lo dice un reporte de las autoridades portuarias de Nogales y Santa Cruz: los inspectores del USDA se fijan en diferencias en el color, en variaciones en el tamaño de naranjas o jitomates, en cosas de apariencia más que de calidad.
El problema para muchos exportadores mexicanos es que se acercan los picos de producción en hortalizas y berries, por ejemplo, que tienen en la temporada de junio y septiembre los meses más ocupados del año.
TAMBIÉN LEE: La carne de res de México al rescate del abasto de EU
México da un paso más hacia el objetivo de que, los equipos electrónicos cuenten con las características de seguridad y resistencia necesarias, hecho que beneficia directamente a los consumidores. Se trata de la NOM-001-SCFI-2018 relacionada a “Aparatos electrónicos-Requisitos de seguridad y métodos de prueba”, que entrará en vigor el próximo 14 de mayo, y que ya tiene en la persona de NYCE, organismo 100% mexicano comandado por Carlos Pérez, a su primer certificador de dicha regulación, esto tras obtener la acreditación y aprobación en la materia por parte de las autoridades competentes. Y vaya que, la industria de la electrónica es un mercado en crecimiento, prueba de ello son las ventas anuales por alrededor de 2.9 mil millones de dólares en el mundo.
TAMBIÉN LEE: El coronavirus da oportunidad a exportadores mexicanos de jitomate
Es muy justo y necesario que las empresas cumplan con sus compromisos con sus empleados, como la cobertura completa de las cuotas obrero-patronales. Estos son recursos muy necesarios para que instituciones como el IMSS adquieran insumos necesarios para tratar a los pacientes en la red hospitalaria (sea por Covid-19 o por otros malestares). Asimismo, ampliar esas protecciones para el personal médico que enfrenta la crisis sanitaria.
Por ello, la Unión Nacional Independiente de Trabajadores y Empleados de Limpieza, lanza una alerta al IMSS, de Zoé Robledo, para revisar diversas empresas como Decoaro y Supervisión, proveedora de limpieza que únicamente tendría registrados ante el Instituto al 20% de los 1,155 empleados listados en su plantilla. Además, se cuenta que que la empresa paga montos menores a los establecidos por la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami); por lo que, los trabajadores tampoco cotizan con el porcentaje que les correspondería en el INFONAVIT, ni en la Afore.
Arca Continental, que preside Jorge Santos y dirige Arturo Gutiérrez no sólo reportó resultados positivos en el primer trimestre del año con un crecimiento de 5.3% en ventas, sino que ha podido dar muestras de superar la crisis sanitaria ante las restricciones de movilidad en sus principales mercados, como México, Estados Unidos, Ecuador, Perú y Argentina. La firma regia implementó programas para motivar a las tiendas de barrio a continuar operando, en donde destaca el acceso a financiamiento y medidas de seguridad e higiene para los clientes y empleados. Además, la paridad peso-dólar también catapultó los ingresos de la segunda embotelladora más grande de Coca-Cola.
Confidencias es un esfuerzo colectivo de la Redacción de Forbes. Las informaciones o hechos relatados, producto de la investigación periodística y de trascendidos, no representan una postura de Forbes México.
