Estamos por alcanzar el 50% de acceso a internet en México, pero eso no significa que tengamos avances en educación, y mucho menos que haya programas serios al respecto.   Si me detengo a pensar por un momento cómo veo a nuestro país y si pudiera observarlo desde una perspectiva externa, casi desde otra dimensión, esto es lo primero que me viene a la mente: un México atrapado en una especie de remolino cuya velocidad va en aumento. Y a su alrededor, varios salvavidas que significan la única opción de salir. Debo elegir la mejor opción: anticorrupción, seguridad, estabilidad económica o educación. ¿Cuál tomarías tú? Si miramos a corto plazo debería tomar el salvavidas anticorrupción; si pensamos a mediano plazo, el salvavidas ideal sería el de la estabilidad económica o incluso el de la seguridad. Con estas opciones podríamos pensar que ya estamos del otro lado y que aquel remolino quedó atrás. Sin embargo, a mi parecer, dichos salvavidas no significan un cambio sustancial para México. Si miramos a largo plazo, sin duda alguna yo tomaría el de la educación y tomaría el riesgo de hacer –ahora sí– las cosas bien. Un cimiento educativo puede ser la última alternativa para llevar a México a otro nivel. No hay nada que inventar: sólo ordenar y mirar detenidamente modelos como el de China o Finlandia; sumarse a programas, campañas o fundaciones; asesorarse y crear programas inclusivos para garantizar una educación de primer mundo: una educación digital.   Las profesiones de un futuro cercano Las profesiones más demandadas están relacionadas con el mundo de la tecnología, la investigación y el desarrollo. Biometría, seguridad, almacenamiento y protección de información, análisis de datos e internet de las cosas se vislumbran como las especializaciones con mayor demanda. Según estudios realizados por la World Future Society y el Centro Fast Future, las profesiones del futuro están definidas por las necesidades medioambientales, de salud, de conexión y de seguridad. ¿Cómo lograr el acceso a estas profesiones cuando aún no se tiene una base sólida ni educativa ni tecnológica? La educación tecnológica tiene varias connotaciones:
  • Internet como vía de conocimiento y riqueza.
  • Programas de inclusión tecnológica.
  • Capacitación tecnológica para maestros.
  • Disminución de la brecha digital (frente a otros países y a nivel generacional).
  • Campañas a favor del uso inteligente de internet, apelar a la razón y al conocimiento de los padres, maestros y niños. (para un joven, internet es sinónimo de Facebook.)
  • Programas de estudio relacionados con las profesiones en cuestión.
Podríamos detenernos a analizar cada una de manera particular y no terminaríamos. Pese a que estamos por alcanzar el 50% de acceso a internet en México, eso no significa que tengamos avances educativos, y mucho menos que haya programas serios al respecto. Un spot en los medios no basta para “anunciar” que en México un grupo de niños usan tablets en el salón de clases. ¿Qué pasa en el resto del país? ¿Cuáles son los avances de estos niños? ¿Qué pasa con todas las licitaciones que se concursan y que poco sabemos de sus resultados?   Modelos probados y comprobados Un movimiento probó que todos los niños podían tener una computadora. One Computer per Child es una iniciativa para acercar el conocimiento y la tecnología a cualquier niño del mundo como una vía de modernizar la educación. Las laptops cuentan con características particulares que las hacen accesibles tanto en uso como en costo. Una niña revolucionó a su país y un sistema completo para luchar por la educación. Malala Yousafzai, Premio Nobel de la Paz, logró lo que muchos países, por cualquier tipo de índole, no se han atrevido: hacer de la educación un sistema inclusivo e innovador. La historia de Malala nos hizo recordar que la educación es un derecho y una vía de conocimiento. Por otro lado tenemos casos particulares de países como Finlandia y China. El país oriental ha invertido 10,100 millones de dólares en educación rural en últimos cuatro años. En Finlandia, a partir del curso 2016-2017, los alumnos no recibirán clases de caligrafía sino de habilidades de escritura digital. Su modelo educativo destaca que el uso de tablets favorece las relaciones sociales y ayuda a los niños a desarrollar su inteligencia, además de ser muy útiles para jugar, leer, navegar y sobre todo para estudiar, ya que aceleran los procesos de aprendizaje. Basándonos en la premisa inicial, si se apuesta por el salvavidas de largo plazo (la educación), seguramente en 20 años las generaciones de hoy estarán dirigiendo el rumbo de este país con una mentalidad digital y bajo esquemas innovadores que puedan impactar aspectos no menos importantes como la economía, la seguridad o la corrupción. Estarán dirigiendo empresas basadas en internet, emprendiendo nuevos negocios y promoviendo la educación tecnológica.   Contacto: Twitter: @SoyYoLucy Semántik   Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.

 

Siguientes artículos

Las 21 empresas petroleras más grandes del mundo
Por

Con el precio de barril a 43 dólares, no es un momento sencillo para la industria, pero aún así parece que falta mucho p...