La casa tequilera originaria de Atotonilco el Alto, cumple 70 años de elaborar un tequila completamente artesanal, hecho con Agave Azul Tequilana y para celebrarlo decidió rendir un tributo a su naturaleza artesanal, a través de una imagen renovada.

La nueva identidad de Tequila Siete Leguas refleja unifica todas sus presentaciones con botellas más limpias y transparentes, elaboradas con un vidrio extra que permite al consumidor  apreciar la pureza y expresión del tequila. La tapa de  madera natural y el diseño de sus etiquetas, muestran los elementos más distintivos de Casa Siete Leguas, impregnados de tradición y sabor, de una forma contemporánea que le habla también a las nuevas generaciones. 

La naturaleza de Siete Leguas ha sido creer confiar en su arraigo y tradiciones, sin miedo al hacerle frente a los nuevos desafíos para mejorar constantemente. Con esa esencia es que deciden lanzar una botella de 1,750 ml, que busca abrazar diferentes momentos de consumo dentro de la vida de los tequileros de corazón.

Diferentes presentaciones de la familia Siete leguas / Foto: Cortesía Siete Leguas.
Diferentes presentaciones de la familia Siete leguas / Foto: Cortesía Siete Leguas.

El secreto de Siete Leguas

Hecho cien por ciento de agaves azules, Tequilana Weber, que crecen de forma silvestre en las laderas de los cerros “a la buena de la naturaleza”. El Tequila Siete Leguas rinde tributo a su origen silvestre, pues mantiene su proceso de destilado tradicional.

Cuando el agave llega a la madurez precisa, los jimadores retiran las pencas con la ayuda de una herramienta filosa, llamada coa, para descubrir el corazón de la planta: la piña.

Madurez de las piñas y botellas Siete Leguas.
Madurez de las piñas y botellas Siete Leguas.

Entonces inicia el proceso de cocción, que se lleva a cabo en pequeños hornos de piedra por 3 días continuos. 

Hornos de piedra en Casa Siete Leguas.
Hornos de piedra en Casa Siete Leguas.

La molienda es 100% en Tahona, el sistema ancestral que desde 1952 se realiza en Casa Siete Leguas con un molino de piedra, que gira lentamente triturando el agave.

Molino de piedra (Tahona), en Casa Siete Leguas. 
Molino de piedra (Tahona), en Casa Siete Leguas. 

Su fermentación es natural, con levaduras salvajes en tanques abiertos con la fibra del agave.

Fermentación natural de Siete Leguas.
Fermentación natural de Siete Leguas.

Al ser de doble destilación, la segunda parte se realiza en pequeños alambiques de cobre con las fibras del agave que aportan un sabor exquisito.

Alhambiques en Casa Siete Leguas.
Alhambiques en Casa Siete Leguas.

Destilación en alambique de cobre en Casa Siete Leguas.Estos primeros 70 años de historia en Casa Siete Leguas, son una celebración de las tradiciones y de la pasión por hacer su tequila con la paciencia que respeta el paso del tiempo, siempre fiel a su naturaleza artesanal, para obtener un producto de exquisitez única, con el valor y herencia de la casa.

 

Siguientes artículos

Covid-19 Ómicron Delta
Es muy pronto para decir que la emergencia por el Covid-19 terminó: GAVI
Por

A la pregunta de si la OMS debería poner fin a la fase de emergencia por Covid-19, Seth Berkley, de GAVI, afirmó que la...