El Departamento del Trabajo dijo que su índice de precios al productor para la demanda final bajó un 0.8%, la mayor caída desde el inicio de la serie renovada de datos en noviembre de 2009. Reuters Los precios al productor en Estados Unidos registraron en enero su mayor declive en más de cinco años por el desplome de los costos de la energía, lo que apuntaba a una inflación sumamente benigna a corto plazo que podría ser un argumento en contra de un alza de la tasa de interés clave de la Reserva Federal. Otros reportes publicados el miércoles sugirieron que la economía está creciendo moderadamente a comienzos del primer trimestre. Los inicios de construcciones de casas cayeron en enero, mientras que la producción industrial aumentó. “Los reportes presentan un panorama decepcionante sobre la recuperación en Estados Unidos y el informe de inicios de construcciones (de casas) en particular refuerza el argumento de que el repunte inmobiliario podría estar en un momento difícil”, dijo el economista de TD Securities en Nueva York Millan Mulraine. El Departamento del Trabajo dijo que su índice de precios al productor para la demanda final bajó un 0.8%, la mayor caída desde el inicio de la serie renovada de datos en noviembre de 2009, después de retroceder un 0.2% en diciembre. Fue la tercera baja mensual consecutiva del IPP. En los 12 meses hasta enero, los precios al productor se mantuvieron sin cambios, en la lectura interanual más débil desde el comienzo de los registros en noviembre de 2010 y después de subir un 1.1% en diciembre. Economistas consultados en un sondeo de Reuters proyectaban un declive del IPP de sólo un 0.4% el mes pasado y un incremento de 0.3% interanual. Los precios del los bonos del Tesoro de Estados Unidos ampliaron su avance tras la publicación de los datos, mientras que el dólar mantuvo su apreciación frente a una cesta de monedas. Los precios más bajos de la energía -afectados por una menor demanda global y un aumento de la producción de esquisto en Estados Unidos- y el fortalecimiento del dólar están limitando las presiones inflacionarias internas. “El informe débil de IPP suma más evidencias de que se acumulan presiones desinflacionarias en Estados Unidos, no sólo en los precios generales, sino también en los subyacentes”, agregó Mulraine. Aunque la Reserva Federal -que tiene una meta de inflación de un 2%- considera que el ambiente de precios contenidos es transitorio, las señales de que la debilidad provocada por los costos bajos de la energía se está filtrando a la inflación subyacente podrían provocar incomodidad entre algunos consejeros de la Fed.   Atención en Fed Una medición clave de presiones a los precios al productor subyacentes, que excluye los alimentos, la energía y los servicios comerciales, bajó un récord de 0.3% el mes pasado tras subir un 0.1% en diciembre de 2014. La mayoría de los economistas espera que el banco central de Estados Unidos comience a elevar las tasas de interés en junio, citando las mejorías de las condiciones del mercado laboral. La Fed ha mantenido sus tasas de interés a corto plazo en cerca de cero desde diciembre de 2008. La economía de Estados Unidos aún enfrenta vientos en contra creados por la fortaleza del dólar y los mercados más débiles en el exterior, factores que pesan sobre los exportadores. La producción industrial en Estados Unidos subió un modesto 0.2% en enero y se mantuvo estable en diciembre, afirmó la Fed en un informe por separado. Los precios mayoristas de la energía se desplomaron en un récord de 10.3% en enero tras caer 6.2% en diciembre, y bajaron por séptimo mes consecutivo. Los precios de los alimentos retrocedieron un 1.1%, la mayor caída desde abril de 2013, tras bajar un 0.1% el mes previo. El Departamento de Comercio dijo en otro informe que los inicios de construcciones de casas bajaron un 2.0% en enero, a una tasa anual desestacionalizada de 1.07 millones de unidades. Pese al declive, provocado por una caída en los inicios de construcciones para proyectos unifamiliares, los inicios de edificaciones permanecieron por sobre la marca de un millón de unidades por quinto mes consecutivo. Frente a enero de 2014, los inicios de construcciones subieron un 18.7%. En enero, los permisos para construir viviendas bajaron un 0.7% a una tasa de 1.05 millones de unidades. El dato de permisos ha superado la tasa de un millón de unidades mensuales desde julio de 2014. Los permisos para construir casas unifamiliares cayeron un 3.1% el mes pasado, mientras que los de viviendas multifamiliares repuntaron un 3.6%.

 

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