Bajo el ticket de COXA ayer martes debutó en la Bolsa Institucional de Valores (BIVA) Cox Energy América, la filial mexicana del gigante energético español que aquí lidera Enrique Riquelme. Como Forbes México adelantó hace unas semanas, la renovable, enfocada en la energía solar fotovoltaica, hizo anoche su colocación en la BIVA y este día será su salida oficial al mercado bursátil mexicano.
El mensaje al mercado es relevante, toda vez que la industria energética privada ha tenido un mal arranque en cuanto a las políticas públicas de la 4T. Sin embargo, es muestra de confianza en que el mercado mexicano de energía solar (el más rentable del mundo, de acuerdo a diversos indicadores) puede generar negocios y beneficios para inversionistas y usuarios.
El monto inicial que anticipaba Cox Energy es de hasta 1,000 millones de pesos (sin contar una eventual sobreasignación) y en la víspera anunció un levantamiento de capital de 765 mdp (de inversionistas institucionales y al menudeo) y que abrirá su bursatilización a un precio de 31.41 pesos por acción.
Con esta OPI, la nueva COXA está marcando varios hitos en el mercado de las bolsas en México. Se convierte en la primera empresa de energía solar fotovoltaica que cotiza en todo el mercado bursátil de América Latina. Es, asimismo, la primera OPI que se gestiona en la BIVA, la bolsa de valores que capitanea María Ariza. Y, es la primera OPI que se genera en cualquier plataforma bursátil nacional en tres años.
Su director general, Enrique Riquelme, contó previamente a Forbes México que los recursos se utilizarán para consolidar proyectos en México, Chile, Colombia y Centroamérica en proyectos de compraventa de energía y de venta directa al Mercado Eléctrico Mayorista.
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