Por: Luis Gonçalves
Actualmente, las organizaciones están impulsando con mayor ímpetu su Transformación Digital y, con ello, el cumplimiento de altas metas que deberán ser alcanzadas con la ayuda del CIO. Esta figura experta dentro de la empresa debe contar con una visión táctica y amplios conocimientos de la industria para identificar las soluciones que le permitirán tener un impacto positivo en el negocio.
Uno de los objetivos más importantes de las organizaciones en la actualidad es obtener valor esencial e inmediato de los datos que generan. Para lograrlo, es necesario que actúen sobre ellos en el punto donde son creados, en el Edge.
Referido como la periferia o las afueras de un típico centro de datos, el Edge Computing está cambiando la manera como operan las organizaciones, transformando resultados e impulsando el crecimiento, convirtiéndose así en una prioridad dentro de la agenda del CIO.
La implementación del Edge representa una evolución hacia un procesamiento de datos mucho más cercano al usuario. IDC predijo que para 2023, más del 30% de toda la infraestructura de datos de TI corporativa desplegada en Latinoamérica será en el Edge, en comparación con los centros de datos corporativos tradicionales.
Las organizaciones deben estar preparadas para este cambio y el CIO debe ser capaz de comunicar los beneficios del Edge Computing a la dirección general de forma clara y tangible. El Edge coloca el poder de procesamiento cerca del límite de la red, en lugar de los centros de datos, habilitando una toma de decisiones veloz con una latencia casi nula. Esto es porque los datos recopilados en el Edge no necesitan viajar a la nube o a centros de datos lejanos, por lo tanto, los dispositivos inteligentes y aplicaciones responden casi automáticamente.
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De hecho, aun cuando se está lidiando con una conectividad de baja calidad en zonas remotas y aisladas, se pueden obtener los datos del Edge. Y debido a que los expertos de datos no tienen que esperar a que los datos se transfieran para su procesamiento, los costos operativos se reducen, al igual que los recursos y la complejidad, ya que los equipos no necesitan examinar minuciosamente entre los montones de datos para adquirir conocimientos útiles, permitiendo a los CIOs ser más selectivos sobre qué información recopilan.
La mayoría de los CIOs ya reconocen la viabilidad del Edge y su dominante posición en el futuro del procesamiento de datos. Por ello, la inversión en esta tecnología continuará aumentando en los próximos años y, cuando se combina con el Edge Computing y sus beneficios tangibles, los CIOs poseen un caso convincente para proponer una mayor inversión al C-level.
Por supuesto que la mejor manera de adoptar el Edge Computing varía entre organizaciones e industrias. Los casos de uso difieren dependiendo de distintos factores, como por ejemplo si la organización de un CIO apoya el trabajo remoto o flexible, o el nivel de importancia que pueda tener el Internet de las Cosas (IoT), la Inteligencia Artificial y la automatización en las operaciones del negocio.
Hoy existe una constante insoslayable, el Edge Computing está transformando positivamente los resultados comerciales y la recolección de estos datos permite a las organizaciones tomar mejores decisiones, lo cual puede resultar en la transformación de las operaciones comerciales con aumento de eficiencias y en consecuencia el crecimiento de la rentabilidad.
Contacto:
Luis Gonçalves, Presidente de Dell Technologies para Latinoamérica
Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes México.
