Pilar siempre ha visto las barreras como oportunidades para aprender. Nos confiesa que esta carrera implica sacrificios: “Durante largos períodos de mi carrera profesional pasé días, semanas y meses en un avión, de un lugar a otro. Esto me ha enriquecido muchísimo”. Una carrera exitosa está formada de momentos críticos que ayudan al crecimiento y a crear un camino más amplio. Para Pilar, este momento se presentó cuando conoció a Lucian Freud, con quien mantuvo una amistad durante los últimos diez años de su vida. “Aprendí tanto con él… A mirar, a ver las obras crecer en los lienzos y, sobre todo, la pasión que sentía por sus creaciones. La forma que tenía de trabajar con su obra era un incentivo para asegurarme que, si alguno de sus cuadros se fuese a vender, sería yo quien lo vendiese”.
La pasión por su trabajo fue un gran argumento para crear su propia galería. Ordovás resalta la necesidad de prestar atención a artistas que no están recibiendo lo que se merecen y el potencial que hay al atraer a un nuevo público, a una nueva generación a la órbita del arte y del coleccionismo. “En un futuro, me gustaría continuar consolidando nuestra presencia en Estados Unidos y mantener el programa de calidad museística tanto en Londres como en Estados Unidos, así como ampliar colaboraciones institucionales con distintos artistas y legados de artistas”.
El arte como negocio
“El arte puede ser una buena inversión, pero creo que es importantísimo resaltar una de las cosas que el arte da: el placer de vivir con él y aprender a través de él todos los días. Es fundamental coleccionar lo que te gusta y, dentro del campo que te gusta, comprar siempre lo mejor. Menos es más, cuando se trata de calidad. La procedencia, la historia de la obra y su condición, además de otros factores, como la rareza o el período, son fundamentales para establecer el valor. Como en cualquier otro campo, es fundamental informarse y contar con un consejo profesional”.
Para establecerse en el negocio del arte es básico estar asesorado y asegurarse de la autenticidad de las obras. “Recomendaría que aprendan, se informen, visiten museos, colecciones… y busquen ayuda profesional antes de comprar, y no se guíen por modas. El mercado del arte es global. Tenemos cifras sobre el mercado público [subastas], pero el mercado privado es más difícil de cuantificar con precisión. Existen fuentes que pueden consultar, como el Informe anual publicado por The European Fine Art Foundation (TEFAF), que establece estadísticas anuales sobre el tamaño del mercado global y, también, por países. Los dos centros más importantes del mundo del arte son Londres (para Europa) y Nueva York (para América). Pero no hay que perder de vista Abu Dhabi, Catar o Asia [en general] con la explosión de museos privados y generaciones de artistas post-Tiananmen”. México posee una vibrante escena artística y los nuevos museos privados convierten su mercado en un escenario cada vez más interesante, grande y global. “Las diferencias entre mercados hacen que mi trabajo sea tan fascinante”.
Artists and Lovers
“El programa de exposiciones es una de mis grandes pasiones. Algunas tardan años en convertirse en realidad y otras ocurren mucho mas rápido. A través de ellas quiero mostrar algún aspecto no destacado anteriormente (Irrational Marks: Rembrandt and Bacon) o un período en la obra de un artista (Calder in India, or Girl) o conexiones no tan obvias entre artistas que trabajan al mismo tiempo en dos lugares distintos del mundo (Giacometti-Smith)”. Con la exposición Artists and Lovers, que acaba de presentar en Nueva York y previamente en Londres, se concentra en once uniones artísticas, desde mediados de los años 30 hasta los años 70. “Quiero mostrar el universo artístico de Peggy Guggenheim, las conexiones entre el surrealismo y las siguientes generaciones y los movimientos artísticos en Estados Unidos”.
El objetivo es mostrar cómo el amor y la amistad pueden dar forma al proceso creativo. También le interesa mostrar a aquellos artistas que, en su momento, estuvieron en un segundo plano respecto a sus parejas y cómo ha cambiado esta visión con el paso del tiempo… como es el caso de Frida Kahlo y Diego Rivera. La inspiración la obtuvo de las conversaciones con su amigo y curador del Kunsthistorisches de Viena, Jasper Sharp. Una de las obras principales es un Autorretrato de Frida Kahlo que el público podrá apreciar por primera vez en décadas. “Haber conseguido ese Autorretrato para esta exposición es todo un triunfo; una obra que se encuentra en manos privadas y no se muestra en público desde hace casi 40 años”.
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