“Cada día son más las personas interesadas en adquirir un producto financiero, lo que pone a los otorgantes un reto para evaluar a detalle a los solicitantes, sin que esto implique largos y cansados trámites o malas decisiones que comprometan el crecimiento de la compañía”, explica Elizabeth Moncada, responsable de financieras no bancarias de Círculo de Crédito.

Las instituciones financieras consideran una serie de factores clave al momento de evaluar la elegibilidad de un cliente para el otorgamiento de un crédito, dichos elementos varían según la institución, el tipo de producto financiero que solicita la persona y sus posibilidades de pago.

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Algunos de los elementos más comunes que las instituciones financieras suelen tomar en cuenta para otorgar créditos incluyen:

  • Historial crediticio: revisan el comportamiento de pago de una persona, incluyendo su puntualidad en los pagos de compromisos adquiridos.
  • Ingresos comprobables: para saber a cuánto ascienden los ingresos de las personas interesadas en un crédito, estos deben ser comprobables con sus recibos de nómina.
  • Garantías: en algunos casos las instituciones financieras solicitan garantías que respalden la deuda, estos activos pueden ser propiedades o bienes.
  • Referencias personales: en préstamos de menor cuantía, las instituciones pueden solicitar referencias personales para obtener una visión más completa de la situación financiera y la confiabilidad del solicitante.

No obstante, esta forma tradicional de evaluar a potenciales sujestos de crédito es hasta cierto punto limitante. Estos parámetros restringen a las instituciones financieras para hacer una evaluación más profunda de sus solicitantes y los aleja de los servicios financieros formales.

En otras palabras, hay otros datos que se no están volteando a ver, lo cual contribuye a la brecha de inclusión financiera en el país. 

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Los otorgantes de crédito hoy tienen más parámetros 

“Es importante que las empresas otorgantes de crédito comprendan el poder de los datos alternativos que dan las herramientas de Open Finance, ya que el historial o referencias personales son aspectos de muchos que vale la pena considerar”, destaca Moncada. 

El ecosistema financiero cuenta con nuevas herramientas tecnológicas que tienen la capacidad de compartir y poner a disposición de las instituciones financieras, información clave de los usuarios para mejorar su toma de decisiones. Algunas de estas nuevas variables que pueden utilizar las empresas para evaluar a sus solicitantes de crédito son:

  • Open Banking: este concepto se refiere a datos sobre cuentas, saldos, movimientos y categorización de instituciones bancarias.
  • Open Finance: son datos sobre empleo formal, información fiscal en el Servicio de Administración Tributaria (SAT) o de inversiones en CETES.
  • Open Economy: esta información es sobre el  consumo de las personas y pagos de servicios básicos, también incluye servicios de telecomunicaciones.

“Al incluir una gama más amplia de datos como seguros, hipotecas u otros servicios financieros, las instituciones pueden contar con una visión más completa de los usuarios a fin de proporcionarles créditos más personalizados; y en contraparte, los consumidores pueden tomar decisiones más diversificadas con mayor transparencia en lo datos que ponen a disposición de los proveedores”, finaliza la especialista.

¿Consideras que tomar en cuenta esas nuevas fuentes de información te facilitará la obtención de créditos para lograr tus metas personales?

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