Cuando leemos o escuchamos todo lo que debemos hacer para preparar a nuestras empresas de cara a esta era digital que vivimos y mantenerlas competitivas, una de las piezas cruciales consiste en tener los recursos humanos con las capacidades adecuadas. Pero cuando una empresa revisa los presupuestos, enfrenta el dilema de hacerlo internamente o aprovechar los servicios de un proveedor externo.
Esta es una de las principales preguntas que se hacen los ejecutivos de empresas en todo el mundo. Es un hecho que la gran mayoría de empresas de tamaño mediano y grandes, están convencidos que para sobrevivir, necesitan transformar su negocio digitalmente. De acuerdo con una encuesta que publicó en 2019 Tech Pro Research a empresas globales, 7 de cada 10 han emprendido iniciativas de transformación digital, lo que, sin duda, refleja el empuje que los negocios están dándole a este tema. Pero necesitan las capacidades para crear valor a partir de ello y, desde luego, varían las acciones que toma cada empresa para lograrlo.
Otro reporte, de GlobalData, señala que la falta de habilidades y talentos es el principal obstáculo para abordar la transformación digital en la industria farmacéutica. Más allá del sector al que se refiere, el dato es relevante y ofrece un panorama de lo que sucede en el resto de los sectores porque ciertamente se trata de habilidades relacionadas con la explotación de los datos digitales y el uso de tecnologías emergentes.
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¿Qué puedes hacer en tu negocio ante este escenario? Algunas empresas deciden invertir en la práctica conocida como upskilling, lo cual implica capacitar o desarrollar las capacidades en sus equipos internos para agregar conocimientos en el uso de las tecnologías digitales como el Internet of Things (IoT), Big Data y la Inteligencia Artificial, así como la explotación de los datos para tomar mejores decisiones y buscar eficiencias en su operación.
Otras compañías optan por enfocarse en su core business y acudir a un partner con experiencia en el desarrollo e implementación de soluciones digitales. En estos casos, los equipos de las empresas trabajan de la mano con el proveedor, pues ellos son los dueños de los procesos y saben las métricas y variables clave para construir la mejor solución y se les conoce como los Subject Matter Experts.
Decidir qué camino tomar —contratar a un proveedor o construir las capacidades internas— depende de la visión que tenga el CEO o el consejo sobre su negocio y el papel que jugará el componente digital, tanto de manera interna, como a nivel de la industria donde compite.
Para la gran mayoría de empresas, las tecnologías de Industria 4.0 no transforman su core —a menos que te llames Uber, Netflix, Google, Facebook o similares—, sino que se convierten en drivers para crear diferenciadores y valor agregado frente a sus competidores, ya sea ganando en eficiencia operativa (producir más a menor costo), en efectividad de venta (menor costo por adquisición de cliente), nuevas fuentes de ingresos (agregar servicios digitales a sus productos físicos) o retención de clientes mejorando la atención post venta.
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Existen otros casos donde los tomadores de decisiones deciden entrarle de lleno a la transformación digital, haciendo cambios en la forma de vender sus productos, su modelo de negocio o, incluso, migrando el mercado al que atienden; por ejemplo, Soulcycle pasó de solo ofrecer clases presenciales de Spinning a crear contenido digital para comercializar sus servicios de manera remote y rentando sus bicicletas.
Otros casos son las empresas fabricantes de turbinas que han cambiado su modelo de negocio, pasando de vender un producto a cobrar por el uso de su producto con algún componente digital (product as a service). De esta manera, el cliente solo paga por el beneficio que le brinda el producto y no asume la propiedad del mismo.
Pero lograr requiere habilidades muy especializadas. Por ello, es importante volver al asunto inicial: desarrollar talento o contratar a proveedores especializados. Desde mi experiencia, estoy seguro de que se trata de un proceso. Al menos en un principio es imposible que una empresa lo haga por su propia cuenta porque carece del conocimiento para evaluar todas las fuentes de datos, las herramientas y tecnologías más adecuadas para construir los casos de uso correctos que ofrezcan resultados en el corto plazo. Después, cuando gane madurez será capaz de hacerlo por su cuenta, y habrá ganado, por un lado, en capacidades digitales y, por otro, en resultados operativos y económicos.
Contacto:
El autor es cofundador de Gesta Labs, estudio de innovación en Industria 4.0
E-mail: [email protected]
LinkedIn: Marcelo De la Garza
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