Llevas semanas buscando vacantes, enviando tu currículum, haciendo entrevistas y finalmente valió la pena: te están dando una oferta de trabajo. Entonces, ¿por qué no te sientes emocionado(a) por ello?

A veces hay algo que no cuadra o no te convence del todo, en esas ocasiones es conveniente hacerle caso a tu instinto. Tal vez hay una poderosa razón para decir “gracias, pero no gracias”. 

Estas son algunas señales de que, en efecto, deberías dejar pasar esa oferta de trabajo: 

1. El paquete de trabajo no es competitivo

Al recibir la oferta de trabajo, también deberías haber recibido una descripción general de todo el paquete, incluidos los días de trabajo, los beneficios, el salario, los días de vacaciones y más. Si esto no es competitivo y has visto empresas similares que ofrecen paquetes mucho más atractivos, esta es una gran señal de advertencia.

Si bien muchas empresas se han visto muy afectadas en los últimos dos años, en realidad esa es una clara razón para invertir en colaboradores talentosos.

Piensa en lo que vales y en lo que otros empleadores estarían dispuestos a ofrecerte; si no cumplen con tus expectativas, es mejor rechazarlos. De lo contrario, podrías sentirte infravalorado(a), mal pagado(a) y resentido(a) unos meses después.

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2. No hay oportunidad de crecimiento 

El desarrollo profesional es muy importante, sin importar la edad que tengas. Después de todo, sin la capacidad de aprender y crecer en tu posición, tu trabajo puede volverse repetitivo y frustrante.

Con eso en mente, procura buscar una empresa que te ofrezca oportunidades para progresar y aprender nuevas habilidades, que te permita diversificarte y trabajar en nuevas áreas del negocio, tomar cursos o iniciativas de capacitación.

También es bueno saber que existe la posibilidad de que puedas ascender en el futuro. Es cierto que esto es más difícil cuando solicitas puestos más altos, pero siempre debe haber espacio para seguir evolucionando dentro de una organización.

Si te parece que una oferta se siente estancada o no hubo discusión sobre tu crecimiento profesional, probablemente sea mejor rechazarla por el bien de tu futuro.

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3. Sus valores no coinciden con los tuyos

La descripción del trabajo, el sitio web de la empresa y la entrevista con recursos humanos te dan la oportunidad de aprender más sobre la misión, visión y valores de la empresa. Si estos no coinciden con los tuyos, entonces no es la compañía para ti.

Seguramente quieres sentir emoción por lo que harás todos los días y el impacto que la empresa tenga en el mundo que te rodea. Si tus valores no se alinean, nunca estarás realmente feliz, comprometido(a) o satisfecho(a) en tu puesto.

4. El empleador te empieza a presionar de inmediato

Has estado en el negocio el tiempo suficiente como para saber que hallar el ajuste perfecto para la empresa es crucial, sobre todo cuando eres contratando para puestos de alto nivel. Y obviamente, sabes que eso suele tomar tiempo. 

Si ni siquiera has tenido un momento para pensar en la entrevista y ya te están presionando para que aceptes el trabajo, tómalo como una bandera roja.

Si un empleador potencial hace eso, es probable que solo quiera cubrir el puesto lo más rápido posible; no está realmente interesado en tu experiencia y en lo que puedes aportar a la empresa. En caso de que te sientas presionado(a) para tomar una decisión en un plazo irrazonable, considera rechazar la oferta y buscar una empresa que te valore y quiera tu conjunto de habilidades.

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5. El empleador parece indeciso 

Durante la entrevista se te dirá más sobre la oportunidad de trabajo y te darán la oportunidad de hacer algunas preguntas. Si en este proceso, el entrevistador es vago o cauteloso a propósito, deberías preocuparte un poco. Cuando son indecisos o reacios a compartir ese tipo de información, es probable que sea porque tienen algo que ocultar. Quizá sería mejor idea decir que no. 

¿Cómo rechazar una oferta de trabajo sin quemar puentes?

Aunque sepas que no trabajarías en ese lugar ni en un millón de años o que tienes frente a ti otra oferta, la que siempre has soñado, es importante decir que no de manera apropiada. Para ello considera estos consejos: 

Muestra tu aprecio por ser considerado(a) para el puesto

Sin duda es importante agradecer a la persona/empresa por la oferta y por su tiempo, un sincero y específico agradecimiento es la opción. Si lo vas a hacer por correo, prueba algo como esto:

Gracias por la oferta para el puesto “x”. Te agradezco mucho que te hayas tomado el tiempo para considerarme y por responder a muchas de mis preguntas sobre la empresa y el rol.

Gracias de nuevo por la entrevista de la semana pasada. Fue genial conocer al equipo y ver las oficinas. Disfruté aprendiendo sobre el puesto “x” y agradezco esta generosa oferta.

Da una buena y breve razón

Si has pasado mucho tiempo en el proceso de contratación o la oferta de trabajo es de una empresa para la que considerarías trabajar en el futuro, es correcto no dejar al reclutador con la duda de por qué estás rechazando el puesto. Di algo como: 

Después de una cuidadosa consideración, he decidido aceptar un puesto en otra empresa.

Después de pensarlo mucho, he decidido que ahora no es el mejor momento para dejar mi puesto actual.

Si bien este puesto parece una gran oportunidad, he decidido buscar otro rol que me ofrezca más oportunidades para perseguir mis intereses en “x”.

Si bien me siento halagado(a) de recibir una oferta tan buena de su equipo, he decidido buscar un rol que se centre más en “x” que en “x”. Así que desafortunadamente tendré que rechazarlo. Ha sido genial conocerte a ti y al equipo, te deseo todo lo mejor.

Después de mucha consideración, he decidido que este no es un buen momento para dejar mi puesto actual. Espero que podamos mantenernos en contacto y que pueda tener el placer de trabajar con ustedes en el futuro.

Para no cerrar el canal de comunicación, y dado que a veces el mundo profesional es muy pequeño y tarde o temprano podrías encontrarte con la persona que te entrevistó, intenta esto:

Me encantaría mantenerme en contacto a través de LinkedIn y ya empecé a seguirte en Twitter. Una vez más, gracias por tu tiempo y consideración.

Y si quieres ser aún más considerado, ofrece referencias si las tienes, sobre todo si la empresa te interesa a futuro: 

Dicho esto, tengo algunas conexiones que creo que serían geniales para la vacante y estaría encantado de enviarte su información.

Rechazar una oferta de trabajo nunca es fácil, pero piensa que puede valer la pena el trago amargo. ¡Seguro el trabajo correcto está a la vuelta de la esquina!

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