Por: Maestro Ramón Martínez Juárez, docente de la Escuela Bancaria y Comercial

La estructura económica de nuestro país tiene tres grandes jugadores que impulsan el dinamismo económico: empresas, gobierno y personas, estas partes interactúan entre sí para generar un ciclo económico de oferta de productos y servicios.

La sociedad aporta la mano de obra que se requiere para producir, el gobierno permite generar las condiciones y desarrollo de infraestructura para que empresas y sociedad se desarrollen, buscando con ello inversión, gasto y ahorro, con el fin de mejorar las condiciones de vida en el país. 

Dentro de esta dinámica existe una estructura fundamental para apoyar la interacción del desarrollo económico: el sistema financiero, mismo que está integrado por instituciones bancarias y no bancarias, este se encarga de generar o proveer recursos que son la materia prima de las instituciones (dinero) y se traduce en productos o servicios.

Las instituciones captan recursos (dinero) a través del ahorro y la inversión (materia prima); por la obtención de estos recursos, las instituciones financieras pagan un premio a empresas y personas, conocido como tasa de interés pasiva, monto que otorgan los bancos a sus clientes por ahorrar o invertir con ellos, a esto se le llama “captación”, una de las principales funciones de la banca en México.

Estos recursos captados por los bancos, traducidos como crédito, son colocados en el mercado para uso de las empresas y personas que requieren adquirir bienes y/o servicios. Por este, la banca cobra un premio o beneficio que se conoce como tasa de interés activa, cobro que aplica un banco por prestar recursos.

Es importante entender este proceso, ya que es la dinámica que siguen las instituciones financieras para poder otorgar préstamos al mercado.

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Ya sabemos cómo se origina un crédito, ahora es importante comprender por qué me es útil y cómo debo manejarlo

Las empresas y las personas tenemos que generar ingresos para poder mantenernos dentro de esta dinámica económica, buscando crecer, desarrollarnos y mejorar las condiciones de vida que llevamos. Por ejemplo, las empresas requieren comprar materias primas, productos o bienes para ser sostenibles y rentables, con las familias y las personas pasa algo similar, se busca cubrir ciertas necesidades con el objetivo de tener mejores condiciones de vida y construir un patrimonio.

Eventualmente los recursos o los ingresos que tienen las personas y las empresas no son suficientes para ciertas necesidades, por ejemplo, cuando las empresas requieren ampliar su planta productiva o expandirse, muchas veces no tienen disponibles los recursos necesarios para poder invertir.

Lo mismo pasa con las personas, a veces la capacidad de ingresos no es suficiente para comprar bienes de consumo duradero o inmuebles y bajo este contexto en necesario recurrir a la búsqueda de estos recursos adicionales. Ahí es cuando el crédito se vuelve una solución. 

Este instrumento permite que las personas tengan los recursos financieros necesarios para cubrir y comprar ciertos productos o bienes que por su monto de adquisición llevaría mucho tiempo obtener.

Existen distintos tipos de crédito, los más tradicionales para las personas son las tarjetas, también conocidos como crédito revolvente, los créditos personales, de nómina, para autos e hipotecarios.

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Las empresas suelen usar créditos de liquidez, préstamos para compra de bienes y servicios, algunos con garantía hipotecaria y también líneas de crédito revolvente.

Uno de los temas importantes a considerar se llama tasa de interés, es decir, el precio que tengo que pagar porque un banco me preste recursos. Aquí existen varios retos que hay que considerar desde el punto de vista de cultura financiera y que suponen algunos mitos:

1. Los créditos no son extensiones de los ingresos: es un préstamo para adquirir ciertos productos o bienes que no se pueden comprar de manera inmediata por la falta de disponibilidad de recursos. Por lo tanto, es un instrumento que permite adquirir ciertos bienes y con el cual existe un compromiso de pago que está alineado a las finanzas personales, de lo contrario se podría caer en una situación de no pago y afectar el historial crediticio de una persona, que en el futuro podría hacerla no elegible para recibir otro crédito

2. El principal factor de decisión para obtener un préstamo no siempre es la tasa de interés, un ejemplo son las tarjetas de crédito que no generan interés si se cubre el monto total usado de la línea en los plazos establecidos. Otro ejemplo es el crédito hipotecario, al tratarse de un bien patrimonial que cuenta con un proceso de plusvalía, el objetivo a perseguir es un mejor plazo, lo que permitirá al comprador tener mensualidades más bajas.

3. El plazo es decisivo y en ocasiones no se le considera así. En función de este se determina el pago que se va a cubrir en cada periodo; el plazo igualmente permite generar cierta liquidez cuando el pago que se hace es menor, no obstante, el monto pagado por intereses podría ser mayor.

4. Cuando se indica que la tasa de interés es del 10%, generalmente las personas comenten un grave error al multiplicar el monto del crédito solicitado por ese porcentaje, ya que asimilan que es lo que se cobrará de interés, eso es un grave error.

Los intereses se cobran en función del plazo total y la tasa de interés anual, un ejemplo es que si yo obtengo un crédito a tres años, pagaré el 10% por el saldo insoluto del primer año (o sea el saldo restante quitando el capital pagado en ese año); más el 10% por el saldo insoluto del segundo año; más el 10% por el saldo insoluto del tercer año, siendo una tasa de interés mayor, conocida como interés real.

Así pues, se paga un interés compuesto. Adicional a ello, hay que considerar las comisiones y seguros, por lo que es necesario considerar tanto el CAT (costo anual total), como la tasa de interés que se pagará durante la vida del préstamo.

5. El crédito no es malo, es una herramienta financiera que permite adquirir bienes de mayor valor; al administrarlo bien y con un puntual cuidado de las finanzas personales, es posible construir un patrimonio (una casa, un auto, viajes, etcétera) a fututo gracias a él.

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