Las preocupaciones por el dinero son una de las principales fuentes de estrés en México y alrededor del mundo. Algunas señales de que el estrés financiero está afectando tu salud y tus relaciones incluyen discutir con las personas más cercanas a ti sobre el dinero, dificultad para dormir, sentirte enojado(a) o temeroso(a), experimentar cambios de humor, cansancio, dolor muscular, pérdida de apetito, disminución del deseo sexual y retraimiento.
Personas en todos los ámbitos experimentan problemas con el dinero y sin duda es importante no reprimirlos, sino entender la situación y afrontarla lo mejor posible.
¿Qué es la ansiedad financiera?
La ansiedad financiera es más que la preocupación general por el dinero, es una ansiedad más profunda y generalizada que hace a una persona obsesionarse con sus finanzas y cómo todo en su vida las afecta, también incluye la sensación de sentirse un fracaso por el lugar en el que se encuentra en la vida.
Preocuparse por no tener dinero suficiente es una posibilidad, pero también está la obsesión de ahorrar cada centavo, de ser completamente consciente en qué se va el dinero o imaginar situaciones en las que se pierde todo.
Efectos del estrés financiero en la salud
Como cualquier fuente de estrés, los problemas financieros pueden afectar enormemente la salud mental y física. Sentirte decaído por las preocupaciones económicas tiene un impacto negativo en el sueño, la autoestima y los niveles de energía.
El estrés financiero puede conducir, entre otras cosas, a:
Insomnio u otras dificultades para dormir: nada te mantendrá dando vueltas por la noche más que preocuparte por las facturas por pagar o la pérdida de ingresos
Aumento (o pérdida) de peso: el estrés puede interrumpir tu apetito, hacer que comas en exceso o te saltes comidas para ahorrar dinero
Depresión: vivir bajo la nube de problemas de dinero puede hacer que cualquiera se sienta deprimido, sin esperanza y con dificultades para concentrarse o tomar decisiones. Según un estudio de la Universidad de Nottingham en el Reino Unido, las personas que luchan contra las deudas tienen más del doble de probabilidades de sufrir depresión
Ansiedad: el dinero puede ser una red de seguridad, sin ella, puedes sentirte vulnerable o ansioso, lo cual suele desencadenar síntomas como palpitaciones, sudoración, temblores o incluso ataques de pánico
Retiro social: las preocupaciones financieras pueden hacer que te alejes de tu familia, pareja o amigos, reduzcas su vida social y te recluyas, lo que empeorará el estrés
Dolencias físicas, como dolores de cabeza, problemas gastrointestinales, diabetes, presión arterial alta y enfermedades del corazón
Métodos de afrontamiento poco saludables, como beber demasiado, abusar de drogas recetadas o ilegales, apostar o comer en exceso. Las preocupaciones por el dinero pueden incluso conducir a autolesiones o pensamientos suicidas
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Qué acciones tomar frente al estrés financiero
Si el estrés financiero está afectando tu salud y tus relaciones, estos consejos te podrían ayudar:
Mantente al tanto de tus emociones: escribe tus preocupaciones para determinar qué problemas abordar primero
Cuida tu salud: sigue una dieta sana y equilibrada; haz ejercicio con regularidad y habla con tu médico si tienes una afección médica preexistente, pues podría agravarse por el estrés
Practica una técnica de relajación: tómate un tiempo para relajarte cada día y dale a tu mente un descanso de la preocupación constante. La meditación, los ejercicios de respiración u otras técnicas de relajación son formas excelentes de aliviar el estrés y restablecer el equilibrio en tu vida
Duerme lo suficiente: sentirte cansado(a) solo aumentará tu estrés y tus patrones de pensamiento negativos. Encontrar formas de mejorar tu sueño durante estos momentos difíciles ayudará tanto a tu mente, como a tu cuerpo
Comparte tus sentimientos con amigos y colegas que te apoyen: identifica a las personas con las que puedes hablar sobre cómo te sientes y que te ayudarán a mantenerte positivo(a)
Sé honesto(a) con tu familia: cuéntales sobre la situación económica y cómo podría afectar el presupuesto familiar, entre todos podrían buscar soluciones
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Elabora un presupuesto: escribe un resumen de tus finanzas y calcula cuánto dinero necesitas para cubrir sus costos. Es posible que debas limitar tus gastos por un tiempo. Reservar algo de dinero para las facturas, crear un fondo de emergencia y pagar primero lo esencial puede ayudar a aliviar el estrés
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Comunícate con tu banco: la mayoría de las instituciones financieras cuentan con políticas para ayudar a los clientes que experimentan problemas financieros. Acércate a tu banco para conocer las posibilidades
Toma acción: otras estrategias para resolver problemas financieros incluyen crear otra fuente de ingresos, leer libros de educación financiera, ver contenido confiable online, hablar un especialista financiero y adquirir habilidades que favorezcan tu generación de riqueza
Aumenta tu autoestima: experimentar problemas financieros puede hacer que te sientas como un fracaso y afectar tu autoestima, pero hay muchas formas gratificantes de mejorar tu sentido de autoestima. Incluso cuando tú mismos estás luchando, ayudar a otros como voluntario puede aumentar tu confianza y aliviar el estrés, la ira y la ansiedad, sin mencionar la ayuda a una buena causa. Pasa más tiempo en la naturaleza, aprende una nueva habilidad o disfruta de la compañía de personas que te aprecian por quien eres
Sé optimista: aunque no lo parezca ahora, la economía eventualmente se encontrará de nuevo en el lado correcto, ese optimismo es clave para superar la situación que vivimos, es clave para nuestro bienestar psicológico individual y colectivo, de modo que como sociedad salgamos de este punto económico y pasemos a uno mejor.
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